André Agassi sigue contando sus secretos

Roger Federer es lo más grande que dio jamás el tenis, Rafael Nadal no habla bien inglés, la lengua delataba el saque de Boris Becker y Brooke Shields, cuanto más lejos esté, mejor. Estos fueron algunos de los comentarios que Andre Agassi, ex número uno del mundo, realizó ante 300 personas en el "Town Hall" de Nueva York, como parte de la promoción de su autobiografía Open.

"Me siento aliviado de saber que ahora entiendo mejor quién soy", dijo Agassi.

Al momento de hablar de sus colegas, dijo que Pete Sampras es su "antítesis... Una de las cosas que más impresionó a Pete de este libro es lo bien que lo conozco a él. Y Pete me forzó a entenderme a mí mismo más rápido".

Agassi también su truco para controlar el potente servicio del alemán Boris Becker, al que venció 10 de las 14 veces que lo enfrentó: "Boris, al servir, sacaba levemente la lengua, ya fuera hacia la izquierda o hacia arriba. En función de eso yo sabía hacia dónde dirigiría la pelota".

El "Kid de Las Vegas" agregó que "recuerdo haber visto en el vestuario junto a amigos míos una rueda de prensa de Becker en el monitor de televisión en la que le gritaba a los periodistas alemanes: '¡Es como si leyera mi mente!'. Y yo tenía ganas de decirle: 'No, Boris. Es tu lengua".

Respecto de Roger Federer, opinó que "hemos visto algo que no sé si volveremos a ver en el tenis. Si lo enfrentara, la gente me preguntaría que qué pasa con el tenis estadounidense. Lo mismo le pasaría a Sampras".

El ex tenista también habló de su relación con las drogas, ampliamente descrita en el libro: "Me daban un montón de energía, era Speedy González. Las drogas me dieron nuevamente ganas de hacer cosas, ése es el problema con las drogas".

Finalmente contó que su hija Jazz Elle juega tenis y que su hijo Jaden Gil se perfila como un gran beisbolista. Y aprovechó de recordar su matrimonio con la actriz Brooke Shields:  "Brooke fue la que me afeitó la cabeza. Y que una modelo te haga eso... Fue muy liberador".

Shields y la actual pareja de Agassi, la ex tenista Steffi Graf, no se conocen, y Agassi prefiere que la cosa siga así. "Algunas veces Brooke llamó a casa y Steffi atendía el teléfono. Cambié el número", comentó.