Bernardo Larraín Matte: "Las políticas públicas se evalúan por sus resultados, no por intenciones"
El presidente de la Sofofa analiza la situación de la economía y plantea una agenda de simplificación regulatoria. Cree que un punto negativo de la cuenta pública fue la escasa mención al crecimiento.
Han sido días agitados para Bernardo Larraín Matte. En la tarde del miércoles fue elegido por unanimidad como nuevo presidente de la Sofofa, el jueves viajó a Valparaíso a escuchar la última cuenta pública de la Presidenta Bachelet, y ayer comenzó a las 8 de la mañana con una entrevista en radio Duna, después de lo cual conversó con La Tercera.
¿Qué es lo que más le preocupa de la economía chilena?
El dato objetivo es que el crecimiento está bajo, menos que nuestros socios comerciales, menos que el mundo en desarrollo, por lo tanto claramente hay factores internos que están incidiendo. Creo que el desafío más relevante hoy día es la reactivación de la inversión. Para eso es fundamental lo que propusimos en nuestro discurso cuando asumimos la presidencia de la Sofofa, que es proponer esta agenda de simplificación regulatoria.
¿Qué juicio hace de este gobierno que termina?
En crecimiento ha sido un mal período y han incidido factores internos. Ahora, el argumento del gobierno es que las reformas que se han hecho puede que impliquen costos en el crecimiento en el corto plazo y un crecimiento potencial en el largo plazo con mayor igualdad. Eso está por verse. Finalmente las políticas públicas se evalúan por sus resultados y no por sus intenciones.
Tras escuchar a la Presidenta, ¿cómo cree que ella va a ser recordada?
Encuentro natural que su discurso haya sido una revisión de sus cuatro años de gobierno. Es su última cuenta pública y me parece natural que lo haga. Ella quiere pasar a la historia como una Presidenta que hizo profundos cambios en el país. Está por verse si esos cambios tendrán un resultado positivo, hasta ahora han tenido un costo en el crecimiento. Los resultados son lo importante, y el crecimiento claramente está alicaído, y en el mundo empresarial pensamos que esos cambios están teniendo un costo en el crecimiento potencial de largo plazo, y no solamente el coyuntural.
¿Qué opina de que el candidato presidencial Alejandro Guillier hable de las trasnacionales voraces para referirse a parte del sector privado?
Hablar de transnacionales voraces es una caricatura simplista.
¿Y no sería adecuado que alguien que use esas caricaturas llegue a la presidencia?
Estas caricaturas se ven de todos lados, también nosotros hacemos caricaturas del mundo político. Una cosa positiva que observé ayer en la cuenta pública, es el respeto. Eso es importante. Como sector empresarial tenemos que valorizar la política, no tenemos que caricaturizarla. Lo mismo debe ocurrir desde el mundo político hacia el empresarial.
En la cuenta pública no hubo mayores menciones al crecimiento económico. ¿cree que este gobierno perdió la oportunidad de reimpulsar el crecimiento?
Nunca es tarde. Como gremio empresarial tenemos que trabajar hasta marzo con este gobierno. El ministro de Hacienda es una persona muy consciente de la importancia del crecimiento y la inversión. Estoy seguro de que es así. Pero por ejemplo, yo le plantearía que esta agenda de simplificación regulatoria no debiera tener colores políticos.
¿Le llamó la atención que el crecimiento no fuera una materia relevante en el discurso?
Me llamó la atención. La parte negativa es que no hubo un protagonismo de la palabra crecimiento.
Si el objetivo es retomar el crecimiento, ¿prefiere que el próximo presidente sea Sebastián Piñera?
El sector empresarial tiene una visión respecto de las políticas públicas que sean pro iniciativa privada, pro mercado, porque queremos ampliar nuestras fronteras de participación. Ese siempre va a ser nuestro punto. Tenemos que convivir con gobiernos de todos los sectores.
Respecto al caso colusión, usted fue director de la filial CMPC Tissue en los años en que se dio la colusión, ¿nunca percibió nada?
No. Los mercados en los que participaba Tissue eran extremadamente competitivos, había mucha intensidad competitiva en las empresas cuyos directorios me tocó participar, que fueron ciertos períodos discontinuos, porque después me fui a Estados Unidos. El principal desafío era la expansión internacional, en Argentina por ejemplo, donde se vivió un momento muy complejo, el foco principal del directorio era la expansión internacional. Estos eran directorios de filiales que hacían seguimiento al negocio. La respuesta es que no.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.