Candidatos cierran campaña y sondeo le da casi 10 puntos de ventaja a Maduro

"La marea roja desbordó Caracas", "lluvia de pueblo". Los chavistas, con sus tradicionales poleras rojas y sus ruidosas bocinas, se tomaron ayer nuevamente la capital venezolana para dar su respaldo, esta vez, a Nicolás Maduro, el candidato ungido por el fallecido Presidente Hugo Chávez, en el cierre de su campaña de cara a las elecciones del domingo. Mientras, su rival, el abanderado opositor Henrique Capriles, hizo lo mismo en Barquisimeto, en el estado de Lara. La masiva jornada coincidió con la difusión de un sondeo de la encuestadora Datanálisis -una de las más confiables del país- que redujo a 9,7 puntos porcentuales la ventaja del presidente encargado sobre el gobernador de Miranda.

Desde las 5.00, los chavistas ya habían comenzado a concentrarse en varios puntos del centro de Caracas para acompañar a su candidato. Envuelto en la bandera venezolana y a bordo de una camioneta con la lectura "presidente", Maduro recorrió durante dos horas y 10 minutos las siete principales avenidas de Caracas. Junto a él iban su esposa, Cilia Flores; el vicepresidente y yerno de Chávez, Jorge Arreaza, y el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello. Su destino final era el escenario principal instalado en el sector de la estación de metro La Hoyada, en el centro de Caracas.

Allí, entre decenas de comerciantes que vendían bigotes postizos de Maduro y llaveros de Chávez a 10 bolívares, la caraqueña María Rojas esperaba el arribo de Maduro para manifestarle su apoyo. "Estamos por encima (en las encuestas). Soy revolucionaria, socialista", dijo la mujer, que lucía una polera con el eslogan "Chávez, te lo juro, voto por Maduro", y un cartel con la imagen del candidato oficialista y un autobús en miniatura, como el que manejaba Maduro cuando trabajaba para el Metro de Caracas.

"Viva Chávez, viva la historia gloriosa, viva este pueblo hermoso", así comenzó su discurso Maduro, quien fue recibido en el escenario por Adán Chávez, gobernador de Barinas y hermano del fallecido presidente, mientras el cantautor Roque Valero interpretaba "No se despide a quien no se ha ido" en honor a Chávez. En la tarima también se encontraba el futbolista Diego Armando Maradona, con un gorro tricolor y una camisa roja con el 10 a su espalda, que además tenía bordada la leyenda "Cristina K 2015", en aparente alusión a una posible reelección de la mandataria argentina.

"Hoy llegamos a un punto que jamás pensábamos llegar, porque llenamos más de siete avenidas que están abarrotadas del pueblo. Es la primera vez que llegamos a esta avenida sin él (Chávez). Pero él sigue al frente con su ejemplo y su amor", expresó Maduro. "La burguesía cree que porque perdimos físicamente a Chávez, creen que el chavismo se acabó. Nosotros les respondemos que ahora es que hay Chávez para rato en esta Patria", agregó.

"Yo voy a ser el presidente de la seguridad, de la paz, de la convivencia… Voy a seguir la corrupción sin clemencia", prometió Maduro, haciéndose eco de los principales problemas que hoy enfrenta Venezuela. El acto concluyó con una canción interpretada por Chávez e imágenes del cierre de su última campaña, en octubre pasado.

En Barquisimeto, en tanto, Capriles cerró su campaña en la avenida Venezuela, una de las más grandes del país. "Tengo con qué decretar que el lunes habrá una nueva Venezuela", fueron las palabras de entrada de el candidato opositor.

"El domingo vamos a elegir entre la vida y la muerte, entre la seguridad para el pueblo o para un grupito de enchufados", dijo Capriles. "Tenemos una oportunidad para el cambio. Le pido a los venezolanos que no se equivoquen. Es hora de abrir un nuevo ciclo", reiteró.

Capriles recordó que entre los primeros cambios para los venezolanos si llega al poder, decretará un "aumento de los sueldos de 40%". Igualmente, prometió tres millones de nuevos empleos, de los cuales un millón será exclusivo para los jóvenes venezolanos. "Mentira fresca tendrá que entregarme el 19 de abril la banda tricolor, una banda que no es de él", dijo al referirse a su adversario.

Según una encuesta citada en un informe al que tuvo acceso la agencia AFP, Maduro tiene una intención de voto de 54,8%, mientras que Capriles llega a un 45,1%. El sondeo fue realizado entre el 1 y el 5 de abril. En otro sondeo previo de Datanálisis, revelado el 18 de marzo, el presidente interino -cargo que asumió tras la muerte de Chávez, el 5 de marzo- aventajaba al líder opositor por 14,4 puntos, obteniendo un 49,2% y 34,8% de la intención de voto, respectivamente. En las elecciones presidenciales de octubre pasado, Chávez le sacó casi 11 puntos de diferencia a Capriles.

En su cuenta de Twitter, el director de Datanálisis, Luis Vicente León, explicó que "el endoso a Maduro arrancó en un peak emocional (por la muerte de Chávez) que tenía una tendencia natural de descenso". Sin embargo, precisó que la candidatura de Maduro "no es suficientemente débil aún".