Caso Fragatas: Fiscalía Oriente obtiene primera condena en Chile por soborno de funcionario público extranjero

El Tercer Tribunal Oral condenó hoy al general (r) del Ejército, Víctor Lizárraga, por soborno de funcionario público extranjero en marco de la arista Famae del denominado caso Fragatas.

La Fiscalía Oriente logró la condena luego que se absolviera a Lizárraga en un primer juicio, lo que fue anulado por la Corte de Apelaciones de Santiago.

En tanto, el juicio oral fue realizado por los fiscales de alta complejidad oriente José Antonio Villalobos y Pablo Norambuena.

Víctor Lizárraga además fue condenado anteriormente por el homicidio calificado del coronel Gerardo Huber en 1992.

El veredicto condenatorio fue unánime por parte de las juezas Nancy Alvarado, Mariela Jorquera y Katrina Chahín. El tribunal citó a los intervinientes para el 19 de noviembre a las 19 horas para conocer la sentencia y la pena a la que será condenado el retirado oficial.

El fiscal Pablo Norambuena sostuvo que "la fiscalía está conforme con el veredicto condenatorio, por graves delitos de soborno a funcionario público internacional, ya que el tribunal considero que las interceptaciones teléfonicas se hicieron en conformidad a la constitución y las Leyes y se sanciona la corrupción en el ámbito de la contratación internacional".

Según expuso la Fiscalía Oriente ante el tribunal oral, la empresa Serlog (Servicios Logísticos Ltda) de propiedad del periodista Guillermo Ibieta Otto, (ya fallecido), se dedicaba a la intermediación de armas y provisiones para las Fuerzas Armadas de Chile.

En dicha firma, Víctor Lizárraga Arias -según el Ministerio Público- desde el año 1999 desempeñaba funciones como director de proyectos, estando a su cargo la relación de la empresa con el Ejército de Chile atendida su calidad de general (R), teniendo la representación de dicha Sociedad ante el Ejército y contando con poderes bancarios para firmar documentos y cheques en representación de la empresa.

Por su parte, el ciudadano coreano Jong Pak Lee comenzó a trabajar en la Embajada de Corea como asesor del agregado del Ministerio de Defensa el año 2001, y entre sus labores estaba promover y ejecutar proyectos de las Fuerzas Armadas de Chile con empresas coreanas. Dichas funciones públicas las desempeñó hasta el mes de mayo de 2008.

En su calidad de funcionario de la embajada, contactaba a agentes o representantes de empresas coreanas para favorecer sus negocios en Chile. Es así como hacía el contacto entre las empresas coreanas y los agentes en Chile. Uno de esos agentes era la empresa Serlog.

Los fiscales Pablo Norambuena y José Antonio Villalobos acusaron que el año 2005, "surgió la posibilidad de que se concretaran negocios de empresas coreanas tanto con la Armada como con el Ejército de Chile en diversas licitaciones".

En ese sentido Jong Pak Lee, según sostuvo el Ministerio Público, en el desempeño propio de sus funciones en la embajada (facilitar obtención de representaciones de empresas coreanas por parte de Serlog) empezó a recibir por parte de Ibieta y Lizárraga $600 mil pesos mensuales como soborno para favorecer a la firma chilena.

"A partir del día 29 de junio del año 2005, Ibieta y Lizárraga, le pagaron mensualmente la suma de $600.000mensuales, mediante giros de cheques de la empresa Serlog en la que ambos tenían facultades para girar cheques, los que se giraban a nombre de la abogada Francesca Botto Villablanca, cónyuge de Pak Lee, quienes para justificar la operación entregaban boletas por una supuesta prestación de servicios profesionales como abogada a Serlog, por servicios que en realidad no se prestaban. Estos pagos se mantuvieron hasta el día 04 de agosto del año 2009, totalizando la suma de $29.400.000.- en pagos indebidos a Pak Lee por parte de Serlog", dice la acusación fiscal.