Cinco consejos para adaptarse mejor al horario de invierno

El sábado comienza el horario de invierno, y los relojes chilenos se retrasarán en una hora. Y pese a que esto podría significar una hora más de sueño, también podría traer consecuencias negativas para las personas, tales como trastornos del ánimo, disminución del rendimiento físico y mental, dolores de cabeza, somnolencia en las tardes e insomnio. Para prevenir situaciones como éstas, Mutual de Seguridad entrega cinco claves que pueden ayudar.

En primer lugar, recomiendan que se mantenga una rutina de sueño normal, aprovechando la hora extra para dormir un poco más de lo habitual. De esta forma, aseguran, le debería dar sueño más temprano.

Es importante preocuparse, además, que las condiciones para dormir sean óptimas, para garantizar el descanso. Para esto, recomiendan que se eliminen los ruidos en la habitación, y se asegure la máxima oscuridad.

En tercer lugar, se recomienda aprovechar la luz natural, que ayuda a que el organismo ajuste sus ritmos neurohumorales a las exigencias del día. Para esto, hay que exponerse la mayor cantidad de tiempo posible a la luz natural, pues prepara el cuerpo para la actividad, mientras que la oscuridad lo prepara para el reposo.

Por otro lado, está la teoría de las "tres pantallas", que indica que una vez que se toma la decisión de ir a dormir, es necesario suspender el uso de televisores, computadores y celulares, pues sus pantallas emiten luz azul, que incentiva la vigilia y perjudica el sueño. La comida es un punto importante al momento de aclimatarse al nuevo horario: puede ser que durante los días posteriores al cambio, le de hambre más temprano. Esto es positivo y se debe aprovechar, para así adelantar la cena y prolongar el reposo.

Por último, se recomienda la actividad física por la mañana, mientras que se sugiere evitar el ejercicio durante la tarde, pues podría afectar el sueño durante la noche.