Dichos de Chadwick refuerzan posibilidad de salida de Ribera

El Mandatario había pasado el fin de semana en la residencia presidencial de Viña del Mar en compañía de su familia y de su amigo Carlos Zepeda. El sábado, además, recibió a los ministros de Defensa, Rodrigo Hinzpeter, y de Hacienda, Felipe Larraín.

Sin embargo, Piñera dedicó la mayor parte del tiempo a estudiar los antecedentes recogidos por el gobierno sobre la vinculación del ministro de Justicia, Teodoro Ribera, en el caso acreditaciones.

Todo, en la víspera de una jornada que en el oficialismo es considerada como decisiva para el futuro del secretario de Estado: altas fuentes de La Moneda dijeron ayer que el Presidente ya tenía tomada desde el viernes la decisión de propiciar la salida del ministro.

El desenlace se produciría en la reunión del comité político que está convocada para las nueve de la mañana de hoy. Con todo, las mismas fuentes no descartaban que Piñera tuviera prevista anoche una reunión con Ribera.

Si bien durante todo el fin de semana el Mandatario optó por guardar estricto silencio frente al caso -ayer permaneció encerrado en la residencia-, fue el ministro del Interior, Andrés Chadwick, quien entregó las primeras luces del complejo panorama. En entrevista con el programa de TVN Estado nacional, Chadwick explicitó ayer por primera vez que el Presidente evaluaba el escenario de la salida del ministro, pese a que enfatizó que no existiría, a juicio del gobierno, ilegalidad en su actuar.

"Lo que está esperando el Presidente es tener clarísimo, es tener una opinión absolutamente formada sobre la situación. No cometer una situación de injusticia y ver si efectivamente hay razones de carácter político, insisto, político, y eso el Presidente obviamente lo está evaluando", dijo el jefe de gabinete.

Antes, Chadwick había señalado que aunque "no hay hechos irregulares, ilícitos, sí hay elementos políticos y prudenciales que uno pueda decir que estuvieron de más".

En la misma línea, se hizo cargo de un análisis que hasta ayer sólo circulaba internamente en el gobierno, cuestionando tanto el manejo que ha hecho Ribera del caso como los antecedentes que lo vinculan.

"Hay algunas declaraciones que, obviamente, en el gobierno no hemos considerado que sean afortunadas, y el propio ministro ha pedido disculpas por esas declaraciones. Creo que no ha sido lo más prudente el hecho de haber contratado al señor (Eugenio) Díaz, posteriormente, en Gendarmería", señaló.

Con ese último punto, el titular de Interior apuntó al fondo de los cuestionamientos: la contratación del ex presidente de la Comisión Nacional de Acreditación Eugenio Díaz (formalizado por cohecho y lavado de activos) por parte de Gendarmería, cuando la CNA resolvía la acreditación del Instituto Incacea, del cual Ribera tiene un 7,5% de la propiedad.

Cercanos al titular de Justicia aseguran que, en privado, ha reconocido que pudo haber cometido una "torpeza", pero no una ilegalidad. Las mismas fuentes dicen que ayer el secretario de Estado valoró que Chadwick defendiera ese punto, aunque transmitió internamente que estaba dispuesto a dar un paso al costado. En tanto, la mesa RN desplegó intensas gestiones para defender la permanencia de Ribera.

La carta de La Moneda para reemplazar a Ribera

La subsecretaria de Justicia, Patricia Pérez, (independiente, cercana a RN) se perfila como la reemplazante de Ribera. Se especuló que asumiría cuando este último sonaba en Defensa en el cambio de gabinete de noviembre.