Eduardo Vargas advierte: "En dos semanas estaré jugando"

Suena fuerte que a una persona le digan "huevo podrido". Eduardo Vargas se enteró en Juan Pinto Durán del duro apelativo que le dio el capitán del Queens Park Rangers, Joey Barton, desde Inglaterra. El ariete, sin embargo, hoy no está preocupado de lo que diga un ex compañero de equipo. De hecho, prefiere ni tocar el asunto. Su única prioridad es ponerse a punto para la Copa América 2015.

Vargas se dejó ver el jueves en Quilín. Se incorporó a los entrenamientos de la Selección junto con los otros cinco elegidos por Jorge Sampaoli para el inicio del proceso para la Copa. Al comienzo, sólo realizó caminata. Gradualmente, elevó la exigencia. El atacante sufrió el 4 de abril una distensión del ligamento colateral de la rodilla izquierda, jugando por el QPR, y hoy está en la última fase de recuperación.

La articulación presenta parámetros normales y ya no hay inflamaciones. Puede flectarla sin inconvenientes. Es decir, Vargas está cerca de recibir el alta dentro de los plazos más optimistas que se habían propuesto en la Roja. En el complejo de Chile recibe la permanente atención del cuerpo médico que encabeza Giovanni Carcuro.

El delantero, una de las piezas clave para Jorge Sampaoli, se ilusiona. Al punto que, en conversación con La Tercera, se anima a ponerle plazo a su reaparición en plenitud de condiciones. "Si todo marcha bien y no hay dolor en la rodilla, en dos semanas estaré jugando", adelanta.

La Copa América se iniciará el 11 de junio. El deseo del renquino es estar en el partido frente a Ecuador en una óptima forma atlética. "Mi recuperación va cada día mejor. Ya estoy trabajando físicamente, en doble turno todos los días. Va bastante bien", relata desde Pinto Durán.

La primera parte de las sesiones incluye trabajos con el cuerpo médico de la Roja. Quien está más cerca de la rehabilitación del atacante es el fisioterapeuta José Amador. El profesional cubano, sobre quien Sampaoli deposita toda su confianza, incluso lo atendió en Brasil, donde también trabajó con Jorge Valdivia.

El ariete se siente bien, otro elemento que en la Roja consideran fundamental. Parte del proceso ha sido enfocado a fortalecerlo sicológicamente, para que sienta la seguridad de volver a la cancha sin temores. "No siento dolor. Después del entrenamiento quedo sensible por la intensidad que le estamos metiendo a los trabajos, pero me han dicho que es normal. Estoy muy tranquilo. Tengo confianza en que todo saldrá bien", dice Vargas desde la concentración.

Hay otra señal fundamental. Esta semana, el delantero volvió a impactar la pelota, sin molestias. "Estoy pateando el balón, pero muy suavemente. Hoy (el jueves) no lo hice. Sólo realicé trabajo físico. No tuve contacto con la pelota. Pero me siento cada vez mejor. Sé que llegaré bien a la Copa", agregó el ariete, cuyo pase pertenece al Napoli.

En el mismo nivel

El ex jugador de la U no le teme al favoritismo que se le ha adjudicado a la Roja de Sampaoli, una sensación que han alimentado los propios referentes del plantel. Por el contrario, lo asume con naturalidad. "Esta es la oportunidad para ganar algo importante. Hay muy buenos jugadores. Y la Copa es aquí, con nuestra gente. En casa, debemos hacernos fuertes", asegura con convicción.

Ni siquiera el poderío de los rivales más complicados que tendrá el combinado nacional, en la competencia continental, como Brasil y Argentina, disminuye su optimismo respecto de lograr un título que le abriría a esta escuadra un lugar en la historia del deporte criollo. "Estoy convencido de que estamos al mismo nivel de las selecciones que me nombras. Lo hemos demostrado en los partidos amistosos que hemos jugado contra ellos y también en el Mundial", sentencia.