El 60% de los demandados por pensiones de alimentos no paga, según Poder Judicial

Hace tres años, Constanza (36) se separó del padre de su hija. El acuerdo legal al que llegaron era que él entregaría un monto mensual de 280 mil pesos como pensión de alimentos. "Hasta ahora no habíamos tenido problemas", dice. Pero hace unas semanas le comunicó que ya no pagaría más. La razón: acababa de tener otro hijo. Este mes ya no depositó la pensión y ella está iniciando una demanda en su contra.

El último informe del Poder Judicial (2011) muestra la magnitud del tema: se dictaron 111.173 sentencias para fijar una pensión alimenticia y 66.967 casos se tramitaron por incumplimiento de estas pensiones. En 2012, los juicios por no pago del beneficio llegaron a 68.650.

Más de un 60% de las pensiones no son canceladas.

La Corporación de Asistencia Judicial (CAJ) reafirma las cifras: dicen que una de cada cinco pensiones registra incumplimiento y que un estudio que realizaron muestra que ya al primer año, el 20% de los demandados deja de pagar la pensión, cifra que sube a 30% al segundo año. La mayoría de quienes incumplen son hombres. En 2012, el 73,5% de las causas de alimentos fueron presentadas por mujeres. ¿Qué pasa con los padres chilenos?

Las razones

Rodrigo Moya, abogado especialista en familia de la CAJ, dice que no sólo se da un alto porcentaje de no pago en las pensiones, sino que en los últimos cinco años han aumentado en casi 300% los juicios en que se solicita una rebaja del monto a cancelar o la eliminación definitiva del beneficio para los hijos.

Si en 2007 los juicios por rebaja de pensión fueron 3.469, para 2012 eran 12.941 (273%). Los que pidieron el cese de la pensión pasaron de 2.806 a 10.495 (274%) en el mismo período.

La existencia de un nuevo hijo es la razón más esgrimida por los hombres para solicitar el cese o rebaja de pensión. La segunda, problemas de salud de alto costo. "Perder el trabajo no es causal para dejar de pagar. La ley presume que se tiene una capacidad mínima de pago, incluso en caso de desempleo", recalca Moya.

Pero el mejor predictor de que el padre no cumplirá es cuando la pensión no se fija por mutuo acuerdo, dice el abogado. "Son los casos en que el padre es notificado de la demanda por pensión de alimentos, pero no asiste al juicio y éste se realiza sin su presencia. La no asistencia presume falta de interés en asumir su responsabilidad", aclara. Y eso se ve reflejado luego en la no cancelación del beneficio.

Claudio Valdivia, director de CAJ, explica que existen tres sanciones para quienes no cumplen con la ley (ver recuadro) y que para iniciar este proceso sólo hay que llevar al tribunal una fotocopia actualizada de la libreta de la cuenta de ahorro donde se deposita la pensión, para demostrar el incumplimiento. "Cualquier persona puede pedir esa medida sin la representación de un abogado. Y no necesita ser familiar o la madre del menor".

Un problema social

Para Rodrigo Moya, los apremios que establece actualmente la ley son importantes. El problema, dice, se da en la notificación al padre o la madre demandada. "La medida se dicta y oficia, pero la brecha está en que se haga efectiva esa orden", aclara. Y eso sólo ocurre cuando el demandado es notificado.

Un ejemplo del bajo alcance de las sanciones lo revelan las cifras del Registro Civil. En 2007, el total de casos en que se suspendió la licencia de conducir por no pago de pensión de alimentos eran 31 casos. En 2011 pasaron a 267 y en 2012, a 489. Un aumento, pero nada en comparación con los más de 65 mil casos de padres que no cumplen con el pago.

Francisco Aguayo, sicólogo e investigador en paternidad, dice que evadir esta responsabilidad es parte de la tradición machista del país, en que las mujeres están forzadas a cuidar a sus hijos bajo todas las circunstancias. Mientras que en los padres esa responsabilidad queda como algo voluntario. "Por eso no existe el mismo juicio social cuando quien se ausenta del cuidado de los hijos es hombre o mujer. A ellos se les permite no cumplir con todas las responsabilidades y esta alta cifra de no pago es una prueba más de cómo eso se refuerza culturalmente".

Aguayo dice que eso no cambiará mientras no se haga frente a las falencias que exhibe el sistema para hacer efectivo este pago, que es una responsabilidad económica tras la separación. "No hay voluntad política para tener medidas efectivas que logren el pago de la pensión de alimentos", dice Aguayo. "Se requiere un dispositivo de medidas efectivas y reformar el sistema completo para que la tuición sea compartida", añade.