El Calafate y Perito Moreno, la poderosa Patagonia argentina

El calafate es el arbusto más característico de la Patagonia. Espinoso, de flores amarillas, tiene un sabroso fruto comestible de color azulado y semillas negras.

Pero no es sólo esto, este peculiar vegetal dio su nombre a uno de los destinos turísticos de mayor atractivo de la Patagonia argentina: El Calafate, pequeña ciudad que ha experimentado el más explosivo crecimiento demográfico de los últimos años, pasando de menos de 7.000 habitantes a comiezos de este siglo, a más de 22.000 este año. Nació como punto de encuentro y comercio de los estancieros de la época, dedicados hasta hace algunas décadas a la crianza de la oveja y a la posterior venta de la lana. Con el tiempo y las nuevas fibras que aparecieron en la industria textil, esta actividad se vio mermada y con un futuro poco favorable y fue así como las bellezas naturales de la región, con sus glaciares y montañas, con su ilimitada estepa y sus hermosas estancias ganaderas, fueron ganando terreno poco a poco, hasta convertirse en el centro de atracción, tanto para turistas argentinos como extranjeros.

Actualmente, El Calafate, ubicado a orillas del Lago Argentino y más o menos a la altura de Puerto Natales, provincia de Santa Cruz, es punto casi obligado de los visitantes que desean tener una imagen real de la Patagonia y un encuentro cercano con un gigantesco glaciar, que descendiendo del Campo de Hielo Sur, se acerca prácticamente hasta la carretera de acceso.

Debido a la sorprendente demanda turística internacional, cuenta con un moderno aeropuerto que atiende vuelos desde Córdoba, Buenos Aires o Bariloche.

Incluso, se suman vuelos desde Punta Arenas. Las compañías que operan regularmente, además de Aerolíneas Argentinas, son Lan y Lade y, ocasionalmente, Aerovías Dap. El acceso terrestre, aunque largo dependiendo del punto de origen, está facilitado por muy buenas carreteras pavimentadas que llegan desde Río Gallegos o Puerto Natales (a 362 km), en cuatro o cinco horas de viaje.

Se nota el alma turística del pueblo. Los productos regionales abundan en las tiendas, desde ricas mermeladas de calafate a tejidos en lana pura, con diseños étnicos que nos recuerdan el tiempo de los tehuelches. Una importante infraestructura hotelera, desde impecables hostales y b&b, hasta un buen número de cinco estrellas, pasando por cabañas y sitios de camping, cubre las necesidades de los más diversos visitantes. Además, agencias de viajes y excursiones y una gran variedad de restaurantes -desde cocina internacional, parrillas y regional- dan la idea de un pequeño Bariloche.

El Calafate es, además de centro neurálgico, punto de partida de actividades, desde simples excursiones en vehículos 4x4 o minibuses, hasta las caminatas por el hielo en alguno de los glaciares cercanos, pasando por circuitos de pesca o cabalgatas rurales. Y a los amantes de la vida silvestre, el avistamiento de aves o la observación de la flora nativa les cautivará el interés.

Pero es el hielo eterno el "señor" de la zona, muy bien representado en primer lugar por el magnífico Glaciar Perito Moreno, distante tan solo 80 km y al que se accede fácilmente en tours diarios o en auto propio. Forma parte de Campo de Hielo Sur, compartido entre Chile y Argentina, y es uno de los de más fácil acceso. Prácticamente, toca el bosque que lo rodea y las pasarelas y miradores cercanos, hasta donde llegan los turistas a fotografiar su frente de casi cinco kilómetros y unos 70 metros de altura. Impresiona, además, porque está en constante movimiento, si tiene suerte, podrá ver uno de los impactantes desprendimientos de bloques de hielo; pero también porque es de los pocos glaciares que avanza en vez de deshacerse. Por ello, los estremecedores crujidos que salen de su interior.

Junto a otros, como el glaciar Upsala y el glaciar Spegazzini, forma parte del Parque Nacional Los Glaciares creado como área protegida en el año 1937 y reconocido por la Unesco como Patrimonio Mundial de la Humanidad.

Son variadas las actividades que se pueden realizar dentro del parque, desde la interesante visita a las pasarelas y miradores cercanos al glaciar Perito Moreno, hasta algunas caminatas guiadas sobre el hielo mismo.

En todo el sector lacustre aledaño a El Calafate se realizan navegaciones en embarcaciones turísticas de primer nivel, en las que los visitantes pueden no sólo acercarse a los glaciares, sino que además, contemplar la flora y fauna locales. Muy cerca de la misma ciudad existen sitios protegidos y lagunas colmadas de aves, donde conviven varias especies nativas representantes del ecosistema patagónico. La Laguna Nimez y la Bahía Redonda sobresalen por estas características.

Trekking en el Perito Moreno.
Para quienes quieran una experiencia más extrema.
Lo hacen varias empresas, $50.000 aprox.

TOUR NORMAL
Por el día desde El Calafate, $20.000, más la entrada al parque ($5.500).

COMO LLEGAR
Vuelos directos desde Buenos Aires desde US$ 180.

POR TIERRA
Hay buses desde Bariloche, Río Gallegos y también desde Puerto Natales.
www.elcalafate.gov.ar/turismo