Familia chilena fue testigo de la tragedia en Niza
El grupo de turistas valdivianos paseaba por la zona del ataque cuando la turba que escapaba en sentido contrario se convirtió en el flagrante aviso del ataque.
Cuando el matrimonio de valdivianos compuesto por Mónica Azurmendi y Oscar Vega inició hace una semana sus vacaciones, nunca imaginaron que el viaje les convertiría en testigos de la matanza que enlutó a Francia.
En su cuarto día en el país, y luego de haber visitado París, el matrimonio y sus dos hijas arribaron hace dos días a Niza, sin sospechar en qué derivaría ese periplo.
Mónica Azurmendi relata cómo la tarde recreativa se transformó en una pesadilla. "Habíamos arrendado un carrito de turismo, para pasear en familia por la avenida. Todo iba bien, las niñas disfrutaban y mi marido bromeaba como lo hace siempre, de pronto comenzamos a ver una especie de estampida humana, mucha confusión, desconcierto y las caras de temor en las personas nos daban la señal de que se trataba de algo serio", explica.
"Nos bajamos del carro sin entender mucho de que se trataba, vimos la turba de gente y corrimos con ellos en dirección opuesta a nuestra ruta, se veían muy asustados y nosotros poco a poco comenzamos a asustarnos igual, recién luego de correr unas veinte cuadras logramos llegar a un lugar con relativa calma, ahí pudimos conversar con algunas personas y enterarnos de lo que había pasado", agrega la valdiviana.
La hermana del ex intendente Henry Azurmendi señaló que aún viven cierta incertidumbre. "Estamos en el hotel poniéndonos en contacto con el consulado; no podemos salir porque existe un estado de seguridad en la ciudad, por lo que debemos mantenernos en la habitación a la espera de las directrices oficiales. Al menos ya estamos bien, logramos comunicarnos con la familia en Valdivia y tranquilizarlos".
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