Francia consigue su paso a cuartos de final tras dar vuelta el marcador ante Irlanda

Francia siempre aparece en el segundo tiempo. O, al menos, así ha sido durante la Eurocopa, donde han marcado todos sus goles en el complemento. Hoy, por los octavos de final, no fue la excepción, y terminó sellando su paso a la siguiente ronda tras una gran jornada de Antoine Griezmann.

Después de terminar invictos en el grupo A, con dos triunfos y un empate, el conjunto de Didier Deschamps tenía la misión de vencer a Irlanda para seguir en competencia. Los de Martin O'Neill, que clasificaron como uno de los mejores terceros, tenía la oportunidad de tomar revancha por lo ocurrido hace siete años, cuando los galos los dejaron sin la posibilidad de ir al Mundial de Sudáfrica 2010 tras una polémica mano de Thierry Henry.

Cuando el partido recién iniciaba en el Stade de Lyon, Paul Pogba cometió una falta dentro del área sobre Shane Long. El árbitro Nicola Rizzoli no dudó en cobrar y Robbie Brady no perdió la ocasión, abriendo la cuenta mediante los doce pasos (2').

La temprana anotación del volante obligó a Francia a hacer algo que le ha costado durante toda la Eurocopa: anotar. Pese a tener la posesión del balón y generarse varias llegadas, tuvieron que trabajar más de la cuenta para imponerse, sin conseguir el anhelado empate antes del descanso. Sin embargo, para el compelento, la historia sería diferente.

Tras un centro de Bacary Sagna, Griezmann comenzó a cimentar el triunfo francés con un certero cabezazo (58'). Cuando el público todavía celebraba la igualdad, el delantero del Atlético de Madrid sentenció el marcador con un tiro rasante (61'), dándole el triunfo a su escuadra.

Irlanda, que jugaba por primera vez una fase eliminatoria en la Eurocopa, poco pudo hacer después de las anotaciones, debido a que minutos después, en el 66', Shane Duffy, uno de los mejores de su elenco, recibió tarjeta roja por una falta sobre Griezmann al borde del área.

Con la ajustada victoria 2-1, Francia deberá enfrentar los cuartos de final ante el ganador del encuentro entre Inglaterra e Islandia, que se jugará mañana en Niza.