Hacienda se abre a incorporar incentivos al ahorro y la inversión

"Estamos dispuestos a analizar todo planteamiento que recaude US$ 8.200 millones (...) en ese sentido, bienvenido sea el debate de cómo podemos aumentar la inversión y el ahorro de las empresas".

Este fue el mensaje directo que entregó ayer el ministro de Hacienda, Alberto Arenas, al corazón del debate parlamentario que viene sosteniendo con los senadores de la Nueva Mayoría desde el 21 de mayo pasado, tras la cuenta pública de la Presidenta Michelle Bachelet.

En sucesivas conversaciones paralelas con los senadores Andrés Zaldívar (DC), Carlos Montes (PS) y Ricardo Lagos Weber (PPD) -todos integrantes de la Comisión de Hacienda de la Cámara Alta-, la autoridad se comprometió a buscar mecanismos paralelos al FUT -ya que la eliminación de éste va de todas maneras- que sirvan como incentivos al ahorro.

En estos encuentros varios son los temas que se han tocado, pero una de las preguntas recurrentes al ministro ha sido qué es lo queda si se elimina el FUT, y como la respuesta ha sido que sólo quedarían algunos instrumentos débiles, los parlamentarios lograron un compromiso de la autoridad de reforzar y buscar alternativas, especialmente para las pequeñas y medianas empresas (pymes).

Aún no está claro si estas nuevas medidas se introducirían como indicaciones al proyecto en trámite -que inicia su análisis en el Senado la próxima semana- o se tratarán en una iniciativa distinta, una vez aprobados los cambios impositivos.

Para explorar un posible acuerdo en esta materia, anoche, el ministro se reunió con los senadores Zaldívar, Montes y Lagos Weber.

INDICACIONES

Otra arista de estas conversaciones han sido las indicaciones que el Ministerio de Hacienda estaría dispuesto a introducir al proyecto una vez que se apruebe en general.

Los parlamentarios anteriormente nombrados, junto a sus pares Guido Girardi (PPD), Jorge Pizarro (DC) e Isabel Allende (PS), han pedido revisar y perfeccionar: renta presunta (oyendo las solicitudes de los agricultores), los tributos ligados a la construcción, el 10% de retención del impuesto a la renta, exenciones a timbres y estampillas para que no afecte a la clase media, cambios en el 14 ter para las pequeñas empresas y aclarar el tributo a las emisiones de fuentes fijas.

Los acercamientos del secretario de Estado no sólo han sido con la Nueva Mayoría, sino también con senadores independientes y de Amplitud, entre ellos, Antonio Horvath, Carlos Bianchi y Lily Pérez.

Es que la estrategia de mayor apertura que fue transmitida ayer, en un seminario del Instituto Igualdad, busca lograr aprobar el proyecto de reforma tributaria con una mayoría que legitime los cambios al sistema.

EMPRESARIOS

Este segundo aire de la reforma sirvió también para dejar atrás el episodio de mayor tensión entre el empresariado y el actual gobierno. Un mes después de que el sector privado golpeara la mesa -acusando no haber sido oído en el debate de la reforma tributaria-, señales de reconciliación surgieron tras la cita que tuvo el secretario de Estado con la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC).

El mensaje del Ejecutivo, dicen los empresarios, fue claro: existe apertura y disposición a perfeccionar el proyecto. De hecho, reconocen que durante las últimas semanas la cartera ya había desplegado una estrategia de acercamiento con algunos gremios, a través de asesores. El trabajo, afirman presidentes de rama, se mantendría durante la segunda fase de trámite legislativo que comenzará este lunes, en la Comisión de Hacienda del Senado, donde además la CPC sería uno de los primeros invitados. "Hemos reiterado los reparos que tenemos a la reforma tributaria (...) vemos que se grava de la misma manera el consumo que el ahorro y eso no nos parece conveniente", acotó tras el encuentro el presidente de la CPC, Andrés Santa Cruz, agregando que buscan que los cambios tengan menor impacto en la inversión y el crecimiento.

Uno de los asesores de rama explica que ante la imposibilidad de revertir la decisión de eliminar el FUT, una de las alternativas que se habría planteado al gobierno para mitigar el efecto de esta medida en la inversión es desintegrar el sistema. Aseguran que esta opción también estaría siendo analizada por la DC.

"En este minuto, lo que está más en juego, además de todas las atribuciones del Servicio de Impuestos Internos, es si la renta atribuida seguirá en la reforma o no. Ahí es donde el ministerio abrió espacios para revisar", señala uno de los técnicos ligados a los gremios. Ese punto ha sido cuestionado por su constitucionalidad.