Japón manifiesta su preocupación por consecuencias de la crisis europea en sus exportaciones

El gobierno nipón expresó su preocupación por el incremento de los riesgos que amenazan su economía, derivados de la crisis de deuda en Europa y su reflejo en el descenso de sus exportaciones, en un informe emitido este domingo por el gabinete.

En su informe económico de julio, el Ejecutivo mantuvo, no obstante, la evaluación positiva del país que se encuentra "en la senda de la recuperación moderada" gracias al aumento de la demanda por las labores de reconstrucción del noreste del país tras el paso del tsunami de 2011, y a pesar de "las dificultades" globales.

Según los últimos datos del Gabinete del primer ministro, Yoshihiko Noda, el volumen de exportaciones de Japón cayó un 1,8 por ciento interanual en el mes de mayo, con lo que detuvo tres meses consecutivos de incremento, destacó el diario económico Nikkei.

"La presión a la baja sobre nuestra economía a través de los efectos negativos en las exportaciones y los mercados financieros está incrementando", destacó el informe. 

Además, el gobierno nipón añadió que aunque no puede "confirmar aún que las exportaciones están siendo dañadas por los problemas de deuda", todo apunta a que, actualmente, la tercera economía mundial "ya está siendo afectada" por la situación en Europa, con lo que vigilará su evolución "con mucha precaución".

Uno de los mayores problemas para las exportaciones niponas es la persistente fortaleza del yen, que en el último año ha sufrido una apreciación de cerca del 10 por ciento frente al euro, ya que perjudica seriamente su competitividad al reducir sus beneficios en el exterior.

Además, en su informe el Ejecutivo avisó de que tomará las medidas que sean necesarias para depreciar el yen siempre que sea necesario y apeló a mantener su lucha contra la deflación.

"Tomaremos las medidas políticas necesarias", afirmó en el documento el Gabinete de Noda, mientras expresó su deseo de que el Banco de Japón (BOJ) "siga implementando medidas importantes, hasta que salgamos de la deflación".

Las previsiones del BOJ sitúan el crecimiento de la economía nipona para el año fiscal 2012 en el 2,3 por ciento, mientras que para el ejercicio fiscal 2013, espera que el producto interior bruto (PIB) aumentara un 1,7 por ciento.