Johnny Herrera estudia dejar la "U" tras juicio en su contra

Mientras en La Serena el plantel de Universidad de Chile cumplía ayer su primer día de pretemporada, Johnny Herrera asistía a la cuarta jornada del juicio oral  que se lleva a cabo en su contra, en el Tercer Tribunal en lo penal del Centro de Justicia por la muerte de la joven Macarena Casassus, en diciembre de 2009.

El arquero, quien por ahora no quiere saber nada de fútbol y sólo está abocado al juicio que en principio concluirá mañana, está autorizado para sumarse a la pretemporada recién el próximo martes por su participación en los dos partidos de la Selección.

Claro que, más allá de que en el cuerpo técnico aguardan su incorporación cuando el equipo ya haya vuelto a Santiago, Herrera tendría otros planes para su futuro inmediato. Y es que el portero tendría tomada la decisión de partir ante la primera buena oferta que llegue desde el extranjero hasta las oficinas de Azul Azul.

Aunque Herrera debe esperar la resolución de la jueza por el proceso que se está llevando a cabo, sobre todo si trae consigo una pena que le prohiba salir del país en lo inmediato, en el entorno del jugador esperan que nada de ello ocurra y que pueda seguir desarrollando su carrera sin problemas en cualquier parte del mundo.

En ese sentido, una vez que se conozca la sentencia, Herrera tiene pensado conversar con la dirigencia de Azul Azul sobre su futuro. El angolino tiene claro que existe en su contrato una cláusula de salida de US$ 2,5 millones y que la posibilidad de salir expiró el pasado domingo, cuando venció el plazo para aceptar una oferta desde el exterior. Sin embargo, al mismo tiempo, cree que debe ser escuchado por todo lo que le dio al club.

"El quiere irse, principalmente porque todo esto del juicio lo tiene agobiado. Siente que necesita despejarse seis meses, un año. Todo esto ha sido muy estresante y seguir en el país no lo ayudará", comenta un cercano al futbolista.

En Azul Azul se aferran a lo que dice el contrato. Incluso las ofertas que han llegado en el último tiempo han sido muy inferiores a la cláusula de salida, que se fijó en julio del año pasado.

En la concesionaria no tienen pensado liberar a uno de sus referentes dentro y fuera de la cancha. Habrá que ver cuánto puede influir la voz del guardavallas quien, en este momento, estaría decidido a irse de la "U".