La Moneda da urgencia a proyectos para impulsar campaña de Frei
En el gobierno aseguran que la ofensiva legislativa, que incluye la inscripción automática y voto voluntario, tiene como trasfondo hacer un velado guiño a Enríquez y a su electorado.
A primera hora de hoy el gobierno enviará al Congreso los mensajes para reactivar la discusión de dos proyectos que fueron parte del programa del ex candidato presidencial Marco Enríquez-Ominami.
Uno de ellos es el fortalecimiento de la educación pública, al que se le dará suma urgencia.
El otro es la reforma electoral que regula el sufragio voluntario, la inscripción automática y el voto en el exterior, al que se le añadirá una indicación sustitutiva. Pero la intención del gobierno es separar el voto en el extranjero que genera discrepancias con la derecha.
La idea, explican, es convertirlo en un tercer proyecto de ley para viabilizar la aprobación de los puntos donde existe consenso, como la inscripción automática y la voluntariedad del sufragio.
Si bien estas iniciativas figuraban dentro del programa de gobierno de Michelle Bachelet, en La Moneda admiten que su reactivación, antes de las elecciones del 17 de enero, tiene como trasfondo hacer un velado guiño al diputado díscolo y a su electorado para sumar apoyos a la campaña de Eduardo Frei.
En el gobierno comentan que finalmente fue Bachelet quien visó el reimpulso de estas iniciativas y entregó su gestión al ministro secretario general de la Presidencia, José Antonio Viera-Gallo.
El titular de la Segpres, había sostenido encuentros con ex miembros del comando de Enríquez y el miércoles y jueves de la semana pasada recibió en su despacho a Lincoyan Zepeda, Cecilia Suárez y Osvaldo Torres -que integraba el grupo Socialistas por Marco- para abordar la agenda legislativa.
Aunque los dirigentes actuaban a título personal, su interés era convencer al gobierno de la importancia de encantar al electorado de Enríquez-Ominami mediante acciones de este tipo.
No obstante, si bien La Moneda estaba dispuesta a avanzar en este plano, no quería dar la imagen de estar cediendo a un pauteo del ex candidato presidencial. De hecho, semanas atrás La Moneda había dicho que no iba a variar su agenda por temas coyunturales.
Ayer en su vocería, la ministra Pilar Armanet confirmó las urgencias, pero señaló que ambos proyectos "llevan bastante tiempo en el Congreso" y forman parte del "itinerario" del gobierno.
OTRAS REFORMAS
La idea del gobierno tampoco era convertir esas iniciativas en un mero acto simbólico para emplazar a la derecha y ganar las simpatías de Enríquez-Ominami. Según explican fuentes de Palacio, la apuesta es que estas leyes sean finalmente aprobadas.
Por ejemplo, algunos parlamentarios manifiestan su temor de que la ley de fortalecimiento a la Educación Pública genere tensiones en la Concertación. Frente a eso, en el Ejecutivo sostienen que es posible que el texto sea afinado.
En todo caso, no son las únicas medidas que baraja La Moneda para las dos semanas legislativas antes de la elección. En carpeta, a la espera de una autorización presidencial para ser enviadas o reactivadas, figuran por ejemplo la reforma constitucional del derecho público del agua y las reformas laborales.
Otra medida que La Moneda prepara para las próximas semanas es el documento de incorporación a la Ocde, que debe ser aprobado por el Congreso.
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