La "Roja" de Mario Salas ganó la apuesta y se metió entre los ocho mejores del Mundial
La Sub 20 chilena se impuso por 2-0 a Croacia, gracias a un gol de Castillo y un autogol.
"El partido más importante de mi carrera". Asi calificó Mario Salas el duelo de Chile ante Croacia, por los octavos de final del Mundial Sub 20. Y lo enfrentó fiel a su cuestionado esquema, con un par cambios motivados por la suspensión de Bryan Rabello. "Jugando así llegamos hasta acá", agregó el DT, quien ganó la apuesta, gracias al triunfo chileno por 2-0.
Chile enfrentará en la siguiente fase a Ghana, que venció 3-2 a Portugal.
El duelo fue similar a los otros encuentros de Chile en el torneo. La "Rojita" trataba de tomar el control del juego, pero con un juego de conjunto al que le costaba superar a una cerrada defensa.
De hecho, en la primera parte fue Croacia la que se generó las mejores ocasiones. A los 13', Simunovic recibió solo en el segundo palo, tras un tiro de esquina, pero no pudo definir. Y a los 31', otra vez destacó el arquero Darío Melo, salvando un remate de distancia e inmediatamente después ganando un mano a mano ante Livaja.
Pese a estas jugadas, la zaga chilena cumplía una buena actuación. El problema estaba arriba.
A los 7', el juez Walter López, de Guatemala, no cobró una mano. Y a los 30', un remate elevado de Nicolás Castillo fue lo más cerca que estuvo Chile de generar peligro. El cuadro de Salas pudo generarse más opciones, pero le faltó calma para la última jugada.
La "Roja" comenzó el segundo tiempo con más confianza. Henríquez y Cuevas probaron al arco en los primeros minutos, con Croacia dejando que Chile avanzara, aunque sin olvidar sus rápidas y peligrosas salidas.
A los 73', un tiro libre de Castillo pudo abrir el marcador. La pelota dio un bote y el arquero Zelenika salvó a Croacia. Al minuto siguiente, Henríquez falló un claro mano a mano. La "Roja" estaba cerca, pero no lograba concretar.
Hasta que a los 81' se desata la euforia chilena. Pelotazo al área de Martínez, Castillo rompe la línea del fuera de juego, y de espaldas al arco, el delantero cabecea y sorprende al portero.
Cuatro minutos después la fiesta fue total para la "Roja" con el autogol de Simunovic, tras centro de Bravo.
Así, pese a los problemas, a las dudas y el nivel mostrado durante el torneo, Mario Salas cumplió. En el partido más importante de su carrera puso a Chile entre los ocho mejores del Mundial Sub 20.
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