La ruta de los glaciares en Tierra del Fuego

Casi en el fin del mundo se realizan viajes en crucero, para recorrer los hielos de la cordillera Darwin y el Cabo de Hornos.




Con la visita a un anfiteatro de glaciares empieza la expedición por el Parque Nacional Alberto de Agostini, que cruza tres comunas de Magallanes: Punta Arenas, Timaukel y Navarino. El viaje comenzó a las 20.00 del día anterior, zarpando desde Punta Arenas, en el crucero Vía Australis, para recorrer el Estrecho de Magallanes hacia el sur, e internarse en los canales más australes de la Patagonia, hasta llegar a Campos de Hielo, de la cordillera Darwin.

Son cerca de las 9.00 y, tras navegar por el fiordo Almirantazgo, el buque recala en la bahía Guerrero, donde se produce el primer desembarco.

El paisaje es imponente: los hielos que se han desprendido cubren el agua y desde las montañas se ven tres masas de hielo que descienden desde el glaciar Brookes.

Cae nieve y la sensación térmica es bajo cero. Claudia Campos y su marido, Claudio Guerra, celebran su aniversario viajando en el crucero. "El paisaje es muy lindo, hay muchos glaciares y es impresionante estar acá y poder ver todo esto", dice Claudia Campos.

Durante la tarde, la siguiente excursión es en el sector de bahía Ainsworth, donde se puede caminar en medio de bosques nativos y ver colonias de elefantes marinos junto a sus crías.

El jefe de expedición del Vía Australis, Marcelo Gallo, cuenta que los turistas que toman el crucero son, generalmente, personas que buscan aventuras en un nivel intermedio, amantes de la naturaleza y de la vida outdoor: "En un 90% son extranjeros y se caracterizan por ser preocupados por el medioambiente y estar muy bien informados".

El segundo día comienza con una panorámica del glaciar De Agostini, que se puede ver desde todas las habitaciones de la nave. Luego, el barco llega hasta el glaciar Aguila, donde los pasajeros pueden realizar una caminata hasta los pies de la formación. Durante la tarde, en botes zodiac, es posible conocer el glaciar Cóndor, ubicado en el corazón de la cordillera Darwin.

El Parque Nacional Alberto de Agostini tiene 1.200.000 hectáreas y lleva el nombre del sacerdote salesiano que trabajó en la investigación del paisaje austral y de los pueblos originarios del lugar.

Entre los pasajeros hay operadores turísticos chilenos y españoles. Iñaqui Collado, quien está entre los últimos, comenta que "este destino representa un viaje de lujo para nuestros clientes españoles. Se planifica con mucho tiempo y ellos esperan, justamente, ver este tipo de paisajes y recibir información especializada de los guías".

La subgerenta de ventas de Australis, Cecilia Arriagada, resalta que el viaje de tres noches, que parte y termina en Punta Arenas, está siendo probado con viajes especiales para ser implementado, completamente, a partir del próximo año. Añade que la compañía está apostando por atraer también a visitantes chilenos, que busquen un viaje exclusivo y con un fuerte contacto con la naturaleza.

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