La ruta que debe seguir en el Congreso la propuesta del gobierno para reformar el binominal

Esta mañana, la comisión de Constitución, Legislación y Justicia del Senado comenzará el debate en torno a los dos proyectos para modificar el sistema binominal: El ingresado la semana pasada por el timonel RN Carlos Larraín y legisladores de la oposición, y el ingresado por el gobierno.

La arremetida del Ejecutivo con su propia iniciativa fue anunciada el jueves pasado por el Presidente Sebastián Piñera en cadena naciona y se ingresó este lunes  tras el comité político de inicios de esta semanal. 

PRIMER PASO EN EL CONGRESO: REVISIÓN DEL PROYECTO EN COMISIÓN DEL SENADO

Una vez que La Moneda envía un mensaje presidencial a una de las dos Cámaras, la comisión que esté vinculada con el tema del proyecto lo recibe.

En este caso, hoy en la mañana, el ministro Larroulet se reunirá con la comisión de Constitución, Legislación y Justicia, instancia en la que expondrá ante los senadores.

Según explicó el secretario de Estado, "tomamos la decisión de que ingrese por el Senado, que es donde se está debatiendo este tema", si bien podría haber comenzado también su revisión en la Cámara de Diputados.

Luego de la presentación en la comisión, los parlamentarios miembros - Soledad Alvear (DC), Alberto Espina (RN), Carlos Larraín (RN), Hernán Larraín (UDI) y Patricio Walker (DC) , quien lidera la entidad- deberán discutir y votar en general y en particular el proyecto.

Si bien La Moneda envió la iniciativa con urgencia simple - que implicaría, de acuerdo al reglamento del Senado que su discusión y votación deberán quedar terminadas en el plazo de treinta días-, el plazo puede modificarse, dependiendo de lo que vaya sucediendo con el proyecto, ante factores como: presentación de indicaciones, negociación con los parlamentarios, o la fusión de los dos proyectos de reforma.

LA APUESTA DEL GOBIERNO: ALINEAR A LA ALIANZA

A la salida de la cita de hoy, los dirigentes de RN y la UDI enfatizaron que revisarán el planteamiento del Ejecutivo y que buscarán llegar a acuerdo.

En ese sentido, Carlos Larraín recalcó que La Moneda les solicitó alcanzar consensos. "Nos entregaron un documento de dieciséis páginas que ahora vamos a estudiar y ver cómo se puede avanzar, para producir si es posible, una convergencia", explicó a la salida del comité político.

Al mismo tiempo, adujo que "el objeto de la reunión fue ver los pro y los contras de ambos proyectos", y que si bien se les pidió aunar criterios,  "no soy la única voz en el Senado, hay varias opiniones".

El timonel de RN acotó que "nosotros (con el proyecto paralelo) conseguimos eso, un abanico que va desde el PC hasta RN, incluyendo a la DC y al PPD. Esto se inició en una negociación bastante larga".

Según apuntaron los líderes de la Alianza, el gobierno buscaría que la propuesta pueda ser respaldada en pleno por ambos partidos oficialistas, conciliando las mayorías.

Sobre ese punto, el senador Alberto Espina planteó que "hay diferencias notorias entre el proyecto que firmó Carlos Larraín con parte de la Concertación, y el proyecto del gobierno, pero cuando existen ánimos de sacar adelante esas iniciativas, es posible ponerse de acuerdo y consensuar".

LOS NUDOS DEL DEBATE 

El gobierno no cuenta con mayoría ni en la Cámara ni en el Senado. Ante ello, el Ejecutivo deberá intentar buscar los votos de los independientes y de la oposición, por lo cual el proyecto presentado en un principio podría sufrir modificaciones durante el transcurso de su tramitación.

Cabe destacar, además, que la propuesta está planteada para ser puesta en marcha en 2017. En ese intertanto, la iniciativa puede experimentar transformaciones y enfrentarse a diversos escenarios de tramitación, en donde lo central es lograr con los votos para su aprobación.

Esto, debido a que durante la discusión y las negociaciones puede suceder, precisamente, que el proyecto presentado por algunos parlamentarios de RN y la oposición se fusione, que cada uno sea revisado en paralelo (y sea votado en la Sala), o que llegue al Senado y sea rechazado, ante lo cual el gobierno podría intentar insistir ingresándolo vía Cámara de Diputados.

Otro punto que puede afectar la iniciativa es que la Alianza - y en especial, RN- no logre llegar a acuerdos. Según detalló Espina, él le planteó su molestia a Larraín por la forma en que se ejecutó la negociación con la oposición, pero precisó que "ese es un tema que no tenemos que ventilarlo aquí en La Moneda, ese es un tema interno de RN que tenemos que verlo internamente en el partido, porque aquí lo que importa a la gente no son las peleas internas (…) la gente quiere unidad de la centroderecha, en una propuesta común".

En esa línea, la forma en que la denominada "disidencia RN" y la corriente Larrainísta limen sus asperezas también será un factor gatillante en el curso que siga la tramitación de la propuesta del Ejecutivo.

Al respecto, Espina afirmó que "no podemos gastarnos el tiempo en las diferencias que tenemos, que tuvimos que sí, son agudas , pero a esta altura uno en política a veces tiene que morderse los labios, morderse la lengua y seguir adelante, buscando cómo cambiamos el sistema electoral".