El MAS quiere definir la nueva reelección de Evo en diciembre

Ha dicho que no será candidato para 2019. Pero intentar reelegirse es un camino que ya ha recorrido Evo Morales. Fue en 2009, meses antes de ganar las presidenciales para su segundo período, que el presidente boliviano modificó la Constitución para permitir una reelección consecutiva. El Tribunal Constitucional no contabilizó su primer mandato (2006-2010), debido a que se encontraba bajo la antigua Carta Magna.

Pero no fue suficiente. En febrero de este año, el jefe de Estado volvió a intentar mantenerse en el poder y presentarse a una nueva elección para 2020-2025. Esta vez, el resultado fue distinto: un referendo rechazó la idea con un 52,3% y le cerró la puerta a su deseo de permanecer cinco años más en el Palacio Quemado. "En todas las encuestas nuevamente somos ganadores para las próximas elecciones, aunque yo no estoy en ese camino, saben ustedes", ha dicho el presidente, cuya aprobación se sitúa en 46%.

Desde la derrota del 21-F, el mandatario, sus ministros y su partido, el Movimiento al Socialismo (MAS) han argumentado que la población votó engañada cuando rechazó una nueva postulación, debido al escándalo sentimental que sacudió al mandatario. Y los sindicatos, campesinos y movimientos afines al oficialismo no se dan por vencidos. Así, han insistido en que Evo debe ser candidato en 2019. Incluso, han planteado la opción de repetir el referendo.

Durante estos meses, los miembros del MAS han debatido qué mecanismos utilizar para que Evo no deje la Presidencia. Esto, principalmente porque, según los analistas, no hay quién lo suceda en el cargo, aunque se ha barajado el nombre del canciller David Choquehuanca.

Esta semana, el presidente de la Confederación Nacional de Interculturales de Bolivia, Leonardo Loza, informó que en el noveno congreso del partido, que se desarrollará a mediados de diciembre, se volverá a ratificar a Morales como presidente del MAS, "pero también vamos a agotar todos los mecanismos para la repostulación para 2019".

Según la dirigenta nacional del MAS, Concepción Ortiz, la idea se discutirá de forma orgánica en diciembre, ya que existe "consenso" de que el mandatario vaya a otra reelección. Esta semana, el vicepresidente Alvaro García Linera llamó a las autoridades del MAS a "enamorar" la mente de los jóvenes para asegurar la continuidad de Evo.

"Los motivos son simples: el MAS sin Evo como candidato no tiene ninguna posibilidad de retener el poder", dice a La Tercera el analista político Carlos Cordero.

De acuerdo al experto, la estrategia que está utilizando el mandatario es que sean los movimientos sociales los que le pidan el "sacrificio de ser nuevamente candidato". Además, señala Cordero, "estamos frente a una crisis del partido, ya que existiría una fuerte pugna interna para ser el heredero de Evo. Por ello, la candidatura de Morales es la única que garantiza unidad y evitar la crisis interna que derive en fractura del proyecto político", advierte.