Medios argentinos destacan díficil rescate de las víctimas por cierre de calle

El 30 de diciembre de 2004 ocurrió una de las tragedias más grandes de la historia Argentina. Un incendio en la discoteque República Cromañón, durante la presentación del grupo Callejeros, dejó un saldo de 194 muertos y más de 1.400 heridos. La polémica por este incidente ha vuelto a surgir durante esta jornada, cuando un accidente ferroviario en la estación Once dejó 49 personas muertas y más de 600 heridos.

Días después de la tragedia ocurrida en República Cromañón, las autoridades de Buenos Aires cerraron la calle Bartolomé Mitre, donde se ubicaba la discoteque, decreto que se mantiene hasta el día de hoy. Uno de los accesos a la estación de trenes Once se ubica precisamente en calle Mitre, por lo que su cierre provocó serios problemas en las labores de rescate.

Los equipos de rescate que querían acceder a la estación de trenes tuvieron que realizar un desvío de siete cuadras para poder prestar los primeros auxilios a los heridos del accidente. En vez de acceder directamente, tuvieron que pasar por las calles Jean Juares, Urquiza, Yrigoyen y Avenida Pueyrredón, según consigna el diario argentino La Nación.

A raíz del incidente, la organización de padres de las víctimas de la tragedia de Cromañón "Que no se repita", exigieron públicamente que la calle Mitre vuelva a abrirse para la circulación vehicular."La calle Bartolomé Mitre ha obstaculizado muchísimo el accionar de policías, bomberos, ambulancias, etc.", admitió en un comunicado firmado por una de sus integrantes, Adriana Magnoli."No queremos formar parte de los padres de Cromañón repudiados por la ciudadanía por impedir tareas de rescate", por lo que pidieron que calle vuelva a ser reabierta. .

Magnoli atribuyó el cierre de la calle a la presión de "un grupo minoritario de padres", aunque no quiso precisar a quiénes se refería. "La calle está cerrada, para mí, por la decisión de algunos padres. Como el movimiento es muy grande, es muy difícil contemplar todas las opiniones. Pero también hay que contemplar la circulación del resto de la sociedad", afirmó.