Nicolás Luksic y sus socios relatan cómo crearon su primer negocio

Durante un año y medio trabajaron Nicolás Luksic Puga y sus socios antes de lanzar Ionix, la empresa que creó la plataforma tecnológica base para el servicio cuenta móvil, que lanzó esta semana el Banco de Chile junto a Entel PCS. El hijo mayor de Guillermo Luksic estaba en Francia, trabajando en el fondo de inversiones AXA Private Equity, cuando empezó a interesarse en la tecnología y en "aplicaciones para automatizar la vida de las personas", cuenta.

En un viaje a Chile conoció a Cristián Feres, Cristián Olea, Raúl Zuleta y Kristian Guevara, con quienes hoy comparte la propiedad de Ionix, una empresa que definen como pionera en Latinoamérica en su rubro. Luksic tiene el 51% de la empresa, en la que también participa el estudio de abogados Eyzaguirre, Burlé, Montes y Ossa. En crear la firma y en capital de trabajo han invertido US$ 1,5 millón y se preparan para un año en el que el foco estará en cerrar nuevos contratos.

Luksic explica que la solución que crearon sirve para distintas aplicaciones y que la idea es que otros agentes del país la adopten. "Esta es una plataforma abierta y queremos que se  sumen distintos agentes, como el retail, la banca y operadoras móviles, por ejemplo", dijo el empresario.

Los socios esperan lanzar nuevas aplicaciones este año. "El servicio de cuenta móvil es una aplicación de nuestro producto, pero puede extendese a otros usos", dijo Feres, gerente de operaciones. Ionix también espera vender su tecnología en la región.

Este es el primer emprendimiento del nieto del fallecido empresario Andrónico Luksic Abaroa, quien fundó un grupo empresarial que hoy lideran sus hijos Andrónico, Guillermo y Jean Paul. "De mi familia he aprendido la importancia del trabajo bien hecho, a poner mucho empeño y dedicación. También, a creer en el instinto, la excelencia, a ir siempre con la verdad y reconocer cuando se cometen errores". Actualmente, su tiempo lo reparte entre el directorio de Banchile Administradora General de Fondos e Ionix.

"Lamentablemente, tuve que renunciar a mi cargo de export manager en la viña (Tabalí-Leyda), porque ya no era compatible estar con un pie en la viña y otro en Ionix", explica Luksic. Agrega que su padre "no se mete mucho en esto. Está muy contento, pero entiende que es un emprendimiento personal en el que no tiene nada que ver el grupo".

Sus socios ocupan otros cargos en la empresa y actualmente están trabajando para estructurar un directorio que tendrá siete integrantes.