NM responde a Piñera por aborto: "Su interés por congraciarse con las élites no puede ir en contra de las mayorías"

Parlamentarios de la Nueva Mayoría mostraron su rechazo al anuncio del candidato de Chile Vamos, Sebastián Piñera, quien aseguró que de salir electo Presidente "introduciría modificaciones" al proyecto de ley que despenaliza el aborto en tres causales.

Desde el PS, los senadores sostuvieron que "el proyecto recientemente aprobado ha sido expresión de una mayoría contundente en la sociedad y ha contado con el apoyo de parlamentarios de todos los sectores políticos, de gobierno, independientes y algunos de oposición".

A juicio de los legisladores, este tema, "de profunda reflexión filosófica y de serio análisis jurídico, ha sido largamente debatido por la sociedad y por el Congreso, y, después de superar todos los canales democráticos hoy verá la luz como ley de la República. Debemos estar orgullosos tanto del proceso como del resultado", sostuvo la bancada.

Para la bancada PS "el candidato Piñera no puede desconocer este proceso democrático que apenas termina, y su interés por congraciarse con las élites y los sectores más conservadores del país no puede ir en contra de la mayoría que se ha expresado legítimamente en las cámaras legislativas. El país no se lo merece".

Frente a este tema, la diputada Karol Cariola aseguró que "no es sorpresa para nosotros que Piñera se proponga revertir este proyecto de ley que ha sido tan celebrado por las mujeres chilenas y nuestra sociedad. Nosotros lo hemos dicho siempre que es un avance para la democracia, es una profundización de ella porque se expresa las mayorías y tal como nosotros entendemos la democracia, la democracia se construye de las mayorías no como le gustaría a Sebastián Piñera que es la imposición de una minoría".

En este sentido, la legisladora sostuvo que hay elementos "perfectibles y que pueden" ser revisados en el futuro, como por ejemplo, la objeción de conciencia institucional por parte de las instituciones que reciban financiamiento del Estado o el número de semanas en el que las mujeres pueden interrumpir el embarazo en caso de violación.