Peñailillo evalúa cambios a proyecto de reforma al binominal

A las 13.30 de hoy en La Moneda el ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, almorzará con los tres senadores de la Nueva Mayoría que integran la Comisión de Constitución: Felipe Harboe (PPD), Alfonso De Urresti (PS), y Pedro Araya (Ind.).

La idea es coordinar con ellos los pasos a seguir en la tramitación del proyecto que reemplaza el sistema binominal por uno proporcional, con 150 diputados y 50 senadores y que esta semana será discutido en el Senado.

Peñailillo también abordará la ofensiva de los parlamentarios de la bancada regionalista que pide una modificación a la iniciativa, ya que -según han cuestionado- mantiene el binominal en regiones de menor población donde solo se podrán elegir a dos representantes.

La preocupación en Palacio se activó debido a que algunos miembros del grupo, como Araya, han amenazado con no respaldar la reforma si es que el texto se mantiene.

Para asegurar la aprobación de la iniciativa La Moneda debe conseguir a la totalidad de los senadores de la Nueva Mayoría e incluso algunos independientes.

Por ello, ayer Peñailillo tomó el teléfono para garantizarle a varios de los legisladores de la bancada regionalista que el gobierno tiene la disposición a encontrar una fórmula que destrabe la reforma.

"Valoramos la disposición que ha mostrado el ministro Peñailillo en torno a escuchar propuestas para destrabar la discusión electoral. Como un hombre que viene de región, va a entender la situación de las zonas extremas", explicó Araya, quien pretende reunirse, luego del almuerzo con la Comisión de Constitución, de forma privada con el titular del Interior.

Ayer, con un lienzo de fondo con la leyenda "No al binominal en zonas extremas", los senadores Fulvio Rossi (PS) y Patricio Walker (DC) insistieron en que "no pueden aceptar la subrepresentación de sus territorios" en el Senado. Ambos parlamentarios pidieron una cita con Peñailillo para proponer indicaciones a la reforma.

Varias fórmulas se barajan. Una de ellas es disminuir de siete a cinco los escaños de Santiago y aumentar de dos a tres los extremos del país. Otra idea es fijar criterios a las regiones para la entrega de los escaños como la cantidad de población.

Un tercer mecanismo sería un nuevo aumento de senadores, lo que podría romper el acuerdo que existe entre el Ejecutivo y Amplitud.

En el Senado, uno de los 23 votos requeridos para aprobar la reforma es el de Lily Pérez, adherente de ese movimiento.

RECHAZO DE LA ALIANZA

Al escenario incierto que enfrenta el gobierno con los senadores independientes, se suma el rechazo -tal como ocurrió en la Cámara de Diputados- de la Alianza al proyecto.

Mientras que el senador UDI Hernán Larraín aseguró ayer que la iniciativa de La Moneda "no respeta el principio de igualdad del voto", en RN rechazan el aumento de senadores que plantea el proyecto.

"Si el gobierno pretende hacer un traje a la medida para los parlamentarios de la Nueva Mayoría o algunos de regiones aumentando enormemente el número de senadores, por supuesto que no estamos de acuerdo", dijo el senador RN Andrés Allamand, mientras que el presidente de ese partido, Cristián Monckeberg, criticó las propuestas de los senadores de zonas extremas. "Quieren un tercer cupo porque saben que les es muy difícil salir elegidos en la próxima elección", remató.