Cámara visa extensión del estado de catástrofe con votación dividida de la oposición: medida debe ser ratificada por el Senado para aplicarse

Un áspero debate entre parlamentarios de oposición y el gobierno marcó la aprobación de la extensión del estado de excepción de Catástrofe durante esta jornada en la Cámara de Diputados.

El proyecto ingresado el 5 de marzo por el Presidente Sebastián Piñera para prolongar hasta el 30 de junio de 2021 la medida -que el 18 de marzo cumple un año y que por ley ser visada por el Congreso cuando se cumple dicho plazo- fue respaldado por 102 votos a favor, 42 en contra y 4 abstenciones. Ahora la iniciativa pasará el Senado, donde se vería mañana, ya que entraría en el primer lugar de la tabla.

Mientras en la Cámara Chile Vamos votó en bloque por extender la medida, en la oposición hubo división, ya que principalmente parlamentarios del Frente Amplio y el Partido Comunista (PC) estuvieron por poner fin al estado de excepción. En el Partido Socialista (PS), además, hubo una completa división entre quienes aprobaron y quienes rechazaron.

Las críticas de los legisladores de oposición apuntaron a la ausencia del Presidente Piñera en la sesión de la Cámara, ya que algunos pretendían que el Mandatario rindiera cuenta ante el hemiciclo de cómo se ha ejecutado el estado de excepción y por qué era necesario mantenerlo.

Por otro lado, algunos parlamentarios acusaron al gobierno de “chantaje” al vincular la permanencia del estado de excepción a diversos beneficios sociales, como el IFE, Bono Covid, Crianza Protegida, entre otros. También hubo reparos a la estrategia sanitaria del Ejecutivo y a la permanencia del toque de queda, donde algunos legisladores propusieron que su aplicación estuviera ligada a las distintas fases del plan Paso a Paso (ver subtítulo). En la víspera, desde la oposición ya habían cuestionado ese último punto.

Hasta la sala para defender la extensión del estado de excepción llegaron los ministros de Salud y de la Segpres, Enrique Paris y Juan José Ossa, respectivamente.

El jefe del Minsal entregó los argumentos sanitarios para mantener la medida: “Chile en este momento tiene una cantidad importante de pacientes positivos, más de 27 mil, y obviamente nos interesa reducir eso. Y si bien este día presentamos una pequeña reducción, tuvimos más de 4 días seguidos con más de 5 mil casos nuevos”, dijo.

El secretario de Estado agregó que “cualquier medida que nos haga relajar las medidas de precaución, nos hará aumentar la cantidad de contagios”. “Yo, como ministro de Salud, tengo una aprobación del 70%, así que no creo que la población esté evaluando mal el manejo de la pandemia”, agregó.

Ossa, por su parte, advirtió que el fin del estado de excepción impediría que una serie beneficios sociales continuaran.

“Beneficios que perderían los chilenos y chilenas si este estado de excepción finalmente no es prorrogado: el IFE, Bono Covid, Crianza Protegida y varios otros beneficios. ¿Qué quiero decir con esto? Cada uno se hace responsable de lo que vota y sepamos que si este estado de excepción no es prorrogado, son millones los chilenos que van a perder los beneficios que este Congreso sabiamente les entregó en su oportunidad”, dijo. Palabras que generaron molestia en los parlamentarios.

En medio de la controversia y de los reparos al toque de queda, el titular de la Segpres se mostró a favor de rendir cuentas ante el Parlamento“. Nos parece sumamente atingente, y en el ánimo de la transparencia del gobierno en el manejo de la pandemia y el estado de excepción, que si se tiene a bien, el Ejecutivo pueda venir cada 45 días a comentar e informar todo lo que se está haciendo fruto del estado de excepción. Nos parece muy conveniente como gobierno poder entregar información”, señaló.

La discusión tuvo diversas ópticas. “Hay que darle a la población todas las herramientas necesarias para resguardar la salud. Si el ministro Paris lo ha hecho bien, es porque el gobierno lo ha hecho bien”, dijo el diputado UDI, Christian Moreira, mientras que su par de RN, Diego Schalper, señaló que “cuando escucho a algunas personas, pareciera que viven en otro planeta y que no consideran que las decisiones que toman afectan en las personas. Pensaba que esto iba a aterrizar con total facilidad, que era de sentido común”.

Desde la otra vereda, la diputada del Partido Comunista, Carmen Hertz argumentó que “no se justifica” el mantener la medida. “No podemos seguir entregando facultades correspondientes al estado de excepción a un gobierno que ha violado los derechos humanos. La ciudadanía no tiene cómo comprender la extensión de estas restricciones que se han usado como control público, y el Presidente no ha venido a dar cuentas correspondientes ante la Cámara. Solo se asegura el toque de queda y uso de fuerzas armadas. Todas las medidas necesarias se pueden seguir aplicando para controlar la pandemia, sin necesidad del estado de excepción”, expresó.

Uno de los parlamentarios más críticos, tanto con el gobierno como con las declaraciones de Ossa fue el socialista Marcelo Schilling, quien expresó que “se trata de restringir derechos, libertades y garantías individuales en un año decisivo para Chile”.

“Para renovar el estado de excepción se nos dice que estamos en las peores cifras desde junio, entonces, ¿por qué renovar esta herramienta? Las palabras del ministro Ossa son odiosas, toman de rehenes a los chilenos porque perderían los beneficios entregados, puro matonaje”, dijo Schilling, añadiendo que aprobaría la medida, pero a solicitud del Colegio Médico.

El diputado de Acción Humanista, Tomás Hirsch, también criticó al titular de la Segpres: “Hemos visto al ministro Ossa amenazar que, de no aprobarse, no podrán seguir entregándose las ayudas, escazas, por cierto. Eso es una mentira, porque muchas de esas ayudas están relacionadas a aspectos del Código Sanitario y se podrán seguir otorgando”, indicó.

En representación de Convergencia Social, Gabriel Boric también tocó ese punto. “El recurso de los jefes de Estado del toque de queda, se ha convertido en una herramienta inaceptable desde nuestro punto de vista. Desde el Frente Amplio hemos propuesto proyectos para extender algunos de los beneficios aplicados en estado de excepción, porque creemos que no hay argumentos para mantener en particular el toque de queda. Todos queremos enfrentar la pandemia de la manera más responsable posible”, expresó.

Su par de la DC, Víctor Torres, en tanto, sostuvo que “el toque de queda debería ser según la fase correspondientes y también ver las conturbaciones. Las cuarentenas deben ser más estrictas para que sean más cortas, y para ello se necesita más fiscalización, así como entregar una cuenta pública mensual, cierre de centros comercial, así como casino. Las medidas dicen una cosa y el discurso es otro”.

El presidente y parlamentario de Evópoli, Andrés Molina, declaró a su tiempo que “debería haber una mayor fiscalización y flexibilización de toque de queda según las fases correspondientes. Por ejemplo, que comience a las 9 pm en comunas en cuarentena”.