Desde su arresto domiciliario, Andrade agradece al sistema judicial por “cuestionar la versión de la Fiscalía y de parte del gobierno”

A través de Instagram y desde su arresto domiciliario, el que cumple en la casa de su madre en la comuna de La Florida, el fundador de Democracia Viva, Daniel Andrade, publicó una carta en que hizo referencia al trabajo de la Fiscalía y al gobierno.

El exmilitante de Revolución Democrática (RD) permanece en su hogar luego de la decisión judicial que sustituyó la medida cautelar de prisión preventiva que el Juzgado de Garantía de Antofagasta había impuesto para él y Carlos Contreras el pasado 15 de diciembre, tras su formalización por fraude al fisco.

Andrade permaneció 75 días en la Cárcel de Antofagasta, en el sector del nudo Uribe, afueras de la ciudad nortina.

A una semana de su salida del centro penitenciario, quien fuera pareja de la diputada Catalina Pérez, escribió en un texto dirigido a su familia y amigos: “Llevo 7 días fuera de la cárcel y quiero darles las gracias a todos quienes permitieron que hoy esté con mis seres queridos, en la casa de mi madre en La Florida, en mi pieza de la infancia a la que nunca pensé que iba a volver. La pinté y arreglé para que sea mi refugio durante el arresto domiciliario”.

“Quiero agradecer a quienes me han apoyado en este largo camino que tengo que recorrer, a quienes han aportado para poder pagar los abogados, un muy buen equipo que me ha respaldado técnicamente. También quiero agradecer al sistema judicial que rompió la inercia, empezó a cuestionar la versión de la Fiscalía y de parte del gobierno, y permitió mi regreso al hogar. A todos quienes de una u otra manera se han hecho presentes”, continuó.

Luego, Andrade se refirió a sus días tras las rejas. “Dejé atrás la cana, donde la realidad parece un delirio. Sin embargo, hay otros, muchos otros que aún siguen dentro. Quiero agradecerles a los internos del módulo 90, en especial al Culún, al Paco Loco, al Elvis, al Jorge, al Peluche y al Raptor. Gracias por el apañe, el cariño, el apoyo y por todas las cosas que sacamos juntos adelante”.

El fundador de Democracia Viva hizo mención a las actividades a las que se dedicó mientras permaneció en prisión preventiva.

“A pesar de lo que se ha dicho, mantuvimos las clases los martes, jueves y viernes en las mañanas. No nos dejaron ingresar una pizarra, pero adentro hay gente bondadosa que nos ayudó con libros de apoyo, plumones y una ventana que intentamos transformar en pizarra. Gracias al capellán pudimos ingresar pintura y echarle una mano al patio, la cancha y restaurar el baño, especialmente las duchas. Pude ingresar libros y estos fueron compartidos. Todos aprendieron a jugar ajedrez y truco, con naipe español. Con eso compartimos en las tardes”, expresó.

Más adelante, también apuntó al momento en que fue formalizado por los tres convenios firmados por su fundación y la Seremi de Vivienda de Antofagasta, por un monto total de 426 millones de pesos.

“Era muy duro ir a la audiencia esposado y escuchar un relato tergiversado por el fiscal y los querellantes, palpar el dolor de la transgresión constante y vivir la impotencia por la falta de igualdad de armas en una audiencia que, en los hechos, limitó mi posibilidad de defensa”, escribió.

Y luego aseguró: “Tengo las manos limpias y no he recibido beneficio económico de esos 426 millones, esto lo demuestran mis cartolas bancarias y las de la fundación. Hay 300 millones que, desde el primer día en que se puso en tela de juicio nuestro trabajo, he buscado devolver, pero el gobierno se ha negado recibir; 30 millones que fueron rendidos y aprobados, y otros 95 están rendidos, pero que tuvieron observaciones menores, algo que se está viendo en el juicio civil. Básicamente se gastó un 30% de lo entregado y se avanzó más de un 30% del trabajo comprometido. Lo gastado coincide, en definitiva, con lo avanzado”.

“Nunca he querido defraudar al Estado y no lo he hecho. Las platas están devueltas o fueron gastadas de acuerdo a lo indicado por el Minvu y sus funcionarios”, indicó.

En la parte final de texto, Andrade señaló: “Aún sigo con un revoltijo de emociones, pero tengo la esperanza de que la verdad hará que nos absuelvan de todo cargo. Hay que seguir cultivando la paciencia y la alegría, para que la felicidad vuelva con fuerza a la vida. Gracias por sus cartas, sus palabras y sus cariños, que hacen que este difícil tránsito, al ser acompañado, sea más llevadero. Pese a todo lo sufrido y vivido, sigo creyendo en la bondad de la humanidad, en un mundo donde la justicia social no sea una utopía, sino un objetivo concreto que guía la lucha y el trabajo de por vida”.