El rol clave de Luis Rojas, “el jefe” del segundo proceso constitucional
Con 30 años de experiencia en la Cámara de Diputados, en enero de este año, el Congreso lo designó para ser el secretario general del proceso constitucional. Fue una pieza fundamental del trabajo en la Comisión Experta y en el Consejo. Su labor fue reconocida de manera transversal y, una vez que cierre todo los asuntos administrativos, volverá a su rol de prosecretario de la Cámara en Valparaíso.
La ceremonia de cierre del proceso constitucional estaba a punto de terminar. El Salón de Honor del Congreso de Santiago estaba repleto. En los casi 50 minutos que llevaba el acto de entrega de la propuesta de nueva Constitución habían sido pocos los momentos de aplausos transversales.
A la presidenta Beatriz Hevia (republicana), el oficialismo no la aplaudió, mientras que al Mandatario Gabriel Boric algunos representantes de izquierda lo felicitaron de pie, otros en la derecha ni siquiera sonrieron luego de que terminara su alocución.
Todo eso cambió cuando casi al término de la ceremonia, Hevia tomó nuevamente el micrófono y dedicó algunas palabras de agradecimiento a la secretaría técnica que acompañó, durante estos ocho meses, a la Comisión Experta y al Consejo Constitucional. Bastaron esas palabras para que el hemiciclo completo aplaudiera con fuerza y lo que antes habían sido gestos divididos, se transformaron en un mar de alabanzas transversales.
En ese momento las cámaras apuntaron hacia una persona en específico que, de manera sonriente -como se le vio a lo largo de todo proceso- agradecía esa ovación. En la testera, sentado a mano derecha de Hevia, estaba el secretario general del proceso constitucional, Luis Rojas (59), quien miraba al público que lo aplaudía mientras algunos pocos incluso se pusieron de pie.
“Ha sido muy emocionante”, cuenta Rojas a La Tercera quien agrega que en ese momento se le vinieron a la mente sus padres “que hicieron un tremendo esfuerzo para que yo me convirtiera en un profesional universitario, el primero de la familia”.
Durante este año el destino de Rojas tuvo un pequeño giro. Luego de que fracasara el proceso de la Convención y los partidos políticos firmaran un segundo acuerdo para tener otro intento para escribir una nueva Constitución, el destino hizo que Rojas se convirtiera en el sucesor del mismo rol que ocupó John Smok durante el año 2021 y 2022.
Fue escogido en enero de este año para dejar sus funciones habituales en la Cámara y dedicarse de lleno a sacar adelante este segundo proceso. Esa vez, cuando se informó de su designación, Rojas remarcó de inmediato cuál iba a ser su estilo. “Es una gran responsabilidad y deseo hacerlo bien. Soy un funcionario técnico y solo quiero quedarme en ese ámbito”, afirmó en ese entonces a este medio.
Un funcionario de largo camino
Rojas lleva 30 años como funcionario del Congreso. Antes de pasar al proceso constitucional, ejercía como prosecretario de la Cámara, es decir, era el número dos luego del secretario general, Miguel Landeros.
Rojas es una persona conocida en el mundo legislativo. Es abogado de la Universidad Católica de Valparaíso y se ha especializado en el derecho parlamentario. Tiene un máster en esa especialidad en la Universidad Complutense de Madrid, un magíster en derecho constitucional en la Universidad de Valparaíso y un doctorado en Derecho en la misma universidad madrileña.
Oriundo de Coquimbo, para Rojas no todo ha sido el Congreso o las leyes. También está inserto en el mundo de las comunicaciones, liderando un programa deportivo en la Radio Valparaíso. Su parte más activa en los micrófonos es en los partidos del fútbol profesional chileno, tarea en la que lleva más de 25 años.
Aunque lidera las transmisiones de los partidos de los equipos más importantes de esa zona -Everton de Viña del Mar y Santiago Wanderers de Valparaíso-, Rojas es un ferviente hincha del club de su región: Coquimbo Unido.
Siempre guardó su bajo perfil, le tocó dirigir votaciones en plenos y la reunión de delegados. Los consejeros, comisionados y asesores acudían a él para resolver dudas respecto al trabajo más técnico, ya sea en votaciones o presentación de enmiendas. Por eso más de alguno solía llamarlo “el jefe del proceso”.
Rojas hizo dupla con el prosecretario Rodrigo Pineda. Ambos fueron las caras más visibles de la secretaría. Su rol tuvo algunos momentos de mayor connotación, como cuando le tocó dar su opinión, a nombre de la secretaría, sobre la duda interpretativa respecto de si el Consejo podía crear nuevos capítulos.
Esa vez, Rojas emitió un pequeño informe en que concluía que el Consejo sí tenía esas potestades. La disputa, aquella vez, fue elevada por la izquierda a la Corte Suprema. El máximo tribunal, en decisión unánime, terminó confirmando la opinión inicial de la secretaría.
Su rol es valorado de manera transversal. “Jugó un rol de ecuanimidad, de serenidad en momentos complejos y sobre todo de compromiso con el buen resultado de este proceso en términos institucionales. Su rol permitió que el clima en general imperante en el Consejo haya sido propicio, de respeto, incluso de solidaridad y de muchas conductas humanas que valoro inmensamente”, comenta el delegado socialista Alejandro Köhler.
Su par, Pilar Cuevas -delegada de la bancada RN-Evópoli- coincide en lo mismo: “Es una excelente persona, un tremendo profesional, alegre, comprometido, servicial, transversal, fue un tremendo apoyo en este proceso”.
“Más allá del cariño hacia mi persona, que valoro enormemente, siento que es un reconocimiento para todos los funcionarios que estuvieron trabajando en este proceso. El reconocimiento transversal a nuestro trabajo nos llena de orgullo”, concluye Rojas luego de la ceremonia de este martes. Ahora que el proceso llegó a su fin, en los próximos días, cuando todo lo administrativo haya quedado cerrado, Rojas tomará sus cosas y retornará a su rol de prosecretario de la Cámara en Valparaíso.
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