Encuesta “La voz de los que (no) votan”: quienes no participan en elecciones tienen más cercanía con polos conservadores o de derecha

Perfiles determinados de las personas que “siempre”, “esporádicamente” y “nunca” votan, con preferencias políticas y su parecer ante el proceso constituyente en curso, es lo que delineó la encuesta “La voz de los que (no) votan”, realizada en conjunto por la Facultad de Ciencias Sociales e Historia de la Universidad Diego Portales (UDP), la Fundación Friedrich Ebert Stiftung (FES) y Datavoz.

El estudio -realizado por un equipo de investigadores compuesto por Christian Sánchez, Paulina Valenzuela, Joao Acharán, Jorge Fábrega y Cristóbal Rovira- tuvo entre sus objetivos conocer la posición ideológica de quienes no suelen participar -o directamente no participan- en procesos electorales. ¿Por qué razón? Debido al amplio espectro de personas que acudió a votar para el plebiscito del 4 de septiembre pasado y que este año, a partir de la aprobación del voto obligatorio, se espera que vuelvan a participar en la elección de consejeros constitucionales del 7 de mayo.

En esa línea, uno de los grandes resultados que concluyó el estudio fue que quienes “nunca” votan concentran una menor aprobación hacia el gobierno que quienes “siempre” lo hacen.

“(Los que ‘nunca’ votan) son personas que no sólo tienen poco interés en la política y no se identifican con los partidos, sino que simultáneamente le creen muy poco a la política y son muy desconfiados”, explicó Rovira en conversación con La Tercera.

Además, quienes “nunca” votan tienen una mayor asociación -que los otros dos grupos- hacia posiciones ideológicas relacionadas al conservadurismo moral o el antifeminismo. Por su lado, los que votan “esporádicamente” manifestaron tener una mayor sintonía hacia la derecha con discursos de antiinmigración y mano dura contra la delincuencia.

Para encasillar a los encuestados, los investigadores midieron el nivel de participación de ellos en las últimas tres elecciones con voto voluntario, correspondientes al plebiscito de entrada de 2020, la primera vuelta presidencial y el posterior balotaje de diciembre del 2021. De esa forma, quienes “siempre” votaron fueron quienes participaron en todos los procesos anteriores (56,7%); quienes votaron “esporádicamente” sólo participaron en alguno de los tres (24,9%); mientras que los que no participaron en ninguno de los mencionados fueron asignados como que “nunca” votaron (12,2%).

La encuesta contó con 1.500 personas encuestadas de forma presencial, lo que Rovira considera como una de las principales cualidades del trabajo del cual fue partícipe. “Esta es una encuesta que es representativa de la población, hecha cara a cara, y eso es la gran novedad, porque hoy la gran mayoría de las encuestas son online o telefónicas”, comentó.

Realizada entre el 10 de septiembre y el 9 de noviembre del año pasado en zonas urbanas del país, y dirigida para personas mayores de 18 años, la motivación de los realizadores de la encuesta nació, en parte, por el resultado del plebiscito de salida del 2022, que contó con voto obligatorio y una participación electoral cercana del 85,9% -lejana del 55,6% de participación que tuvo la segunda vuelta presidencial del 2021- dándole una victoria abrumadora y poco prevista a la opción Rechazo.

“Mostrar los datos de esta manera es invitar a hacer una reflexión de quiénes son esas personas que a contar de ahora están obligadas a ir a votar: cuáles son sus perfiles ideológicos y sus características sociopolíticas”, añadió Rovira.

La encuesta arrojó que quienes “siempre” votan pertenecen a los grupos socioeconómicos más altos. También estableció que tienen -en proporción con los demás encuestados- un mayor nivel educacional, considerando educación superior completa o más.

Por otro lado, el sexo que predomina en los que “nunca” votan es el femenino, con un 54,6%, mientras que el grupo socioeconómico que sobresale es el C2 y C3, considerados sectores de medios ingresos. Las personas entre 30 y 44 años son las que lideran en el rango etario como las que “nunca” han participado en las elecciones de voto voluntario.

Otro punto relevante es que quienes “esporádicamente” y “nunca” votan, pese a tener preferencia por un sistema en donde predomine la democracia, un tercio de los encuestados de cada grupo respondió que le era indiferente un gobierno democrático o uno autoritario (31,9% y 33,9%, respectivamente).