Escaños reservados enfrenta votación clave sin acuerdo para su aprobación

Un escenario complejo enfrentará la reforma que busca garantizar escaños reservados para pueblos indígenas en la convención constitucional.

El proyecto -en segundo trámite- fue aprobado la semana pasada por la Comisión de Constitución con las indicaciones propuestas por la centroizquierda y está previsto, según el último acuerdo de comités, que sea revisado este miércoles por la sala.

El texto aprobado propone asegurar 24 escaños a los 10 pueblos originarios legalmente reconocidos y uno para el pueblo tribal afrodescendiente. Dichos cupos serían adicionales a los 155 que contempla -según el acuerdo del 15 de noviembre- el órgano que redactará la nueva Constitución y podría votar por ellos todo aquel que se identifique como parte de una de esas etnias en una segunda papeleta.

Sin embargo, tanto desde el oficialismo como desde la oposición reconocen que no hay ninguna posibilidad de que la norma, tal como está, logre el quórum mínimo de 3/5 que requiere para su ratificación (26 votos). “Sin duda, la situación es bastante compleja. Si la votación se realizara mañana, probablemente esto se rechazaría”, sostuvo el senador Pedro Araya (independiente).

Si bien la centroizquierda y las propias comunidades han buscado convencer a algunos parlamentarios oficialistas, como los RN Manuel José Ossandón, Juan Castro, Marcela Sabat o la independiente Carmen Gloria Aravena, ninguno de ellos estaría por respaldar la propuesta de la centroizquierda mañana en sala. En Chile Vamos, de hecho, esperan reponer las indicaciones que propusieron en la Comisión de Constitución para garantizar 15 escaños reservados, electos en base a un padrón especial e imputables a los 155 convencionales.

“La propuesta de la oposición se salta algo plebiscitado, que son los 155 constituyentes. Eso se les propuso así al país y a los ciudadanos; por una mayoría muy importante aprobaron eso”, sostuvo Rodrigo Galilea (RN). El legislador, además, subrayó que el texto, al establecer una autoidentificación sin acreditación de por medio, iría en contra de todos los tratados internacionales y de la Ley Indígena.

En esa línea, ayer el ministro de Segpres, Cristián Monckeberg, insistió en que los escaños para pueblos originarios tienen que estar dentro de los 155. “Esperamos que la oposición entienda que no podemos pasar a llevar el mandato ciudadano”, recalcó.

En la centroizquierda aseguran en privado que ven poco margen ya para lograr un acuerdo de aquí al miércoles. En cambio, apuestan a que una vez que se rechace el texto aprobado en particular, se deseche también lo ratificado en general para que, en tercer trámite, el proyecto pueda ser enviado a una comisión mixta. “Ahí estaremos todos entre la espada y la pared y tendremos que ceder”, dice un senador del sector, desde donde hablan de llegar hasta máximo 17 escaños. En paralelo, distintas comunidades trabajan una propuesta para establecer 20 escaños fijos, 10 imputables a los 155 y otros 10 adicionales a ellos.

“Sería un grave error que los pueblos indígenas quedaran fuera, por lo tanto, es muy importante que con el gobierno se converse y se logre un acuerdo que permita aprobar esta reforma. Es una tremenda responsabilidad de todos, este proceso necesita legitimidad”, afirmó Francisco Huenchumilla (DC).

En el gobierno, en tanto, fijaron una reunión -que se desarrollaba al cierre de esta edición- con sus senadores para coordinar una estrategia común. En el oficialismo algunos reconocen que, más allá de que consideran que la propuesta opositora es poco razonable, un aumento de escaños podría afectar electoralmente a Chile Vamos en la elección de los convencionales constituyentes.