Nuevo brazo jurídico de Elizalde es sobrina de Matthei y le ganó un juicio a Vallejo

Una testigo privilegiada tuvo la polémica que se dio, el martes pasado, en la Comisión de Seguridad del Senado, cuando el ministro secretario general de la Presidencia (Segpres), Álvaro Elizalde (PS), trató de “bruto” al senador Felipe Kast.

El legislador de Evópoli, que hoy preside la instancia, le había negado el uso de la palabra al ministro de la Segpres para no demorar la votación de indicaciones en torno al proyecto que eleva penas por usurpaciones de terrenos.

Sin embargo, justo en momentos en que Kast daba la orden para votar, Elizalde mantenía una conversación en segundo plano con la abogada y asesora de la Segpres, Elisabeth Matthei Schacht. Fue en esos instantes, mientras conversaba con ella, en bajo tono, en que usó la expresión de “bruto”, que igual alcanzó a ser escuchada por Kast.

Antes de la polémica, a la abogada -quien es nieta del fallecido excomandante en jefe de la Fach, Fernando Matthei, y sobrina de la alcaldesa de Providencia, Evelyn Matthei-, le correspondió exponer en dos ocasiones para defender indicaciones del gobierno: una que buscaba evitar las detenciones ciudadanas, y otra, para prevenir estafas por terrenos tomados. En un acto de confianza, Elizalde le cedió a ella el uso de la palabra para que hablara a nombre del Ejecutivo.

Ambas enmiendas defendidas por Matthei fueron aprobadas por unanimidad. Era la primera vez que exponía en una instancia del Congreso, a pesar que desde el año pasado trabaja en la División Jurídica y Legislativa del ministerio como encargada de los temas de seguridad.

Antes de asumir como ministro, Elizalde sólo tenía lejanas referencias de ella, pues participaba muy ocasionalmente en la discusión de algunas leyes, pero siempre en segunda línea, tomando notas. De hecho, estuvo como espectadora, en otra polémica sesión de la Comisión de Seguridad del Senado, el 3 de abril pasado, cuando la ministra del Interior, Carolina Tohá, decidió abandonar la discusión de la Ley Nain-Retamal, luego de que la mayoría de senadores de oposición rechazara la propuesta del gobierno.

En el Ejecutivo señalan que Elizalde se hizo una excelente opinión de ella, a quien le dio más responsabilidades. En La Moneda remarcan que está “participando activamente en la tramitación de los proyectos de ley de la agenda de seguridad”.

Esta área legislativa es uno de los flancos débiles del gobierno, debido a la división que generan estos temas en el oficialismo. Una situación que ha sido aprovechada por la derecha.

Si bien esta agenda es supervisada directamente por el equipo de Tohá, en las últimas semanas, la Segpres y el mismo ministro de Justicia, Luis Cordero, cuya especialidad no es el Derecho Penal, intentaron cubrir la fragilidad legislativa en esta materia.

No obstante, en la misma sesión que se dio la polémica con Kast, el gobierno dio una señal nueva con la irrupción de Elizalde, quien, acompañado de Matthei, asumió la titularidad de la discusión sobre usurpaciones. Este es un tema que culturalmente complica a la izquierda (debido a la visión reivindicativa de las tomas), pero que hoy está incluido en la agenda de 31 prioridades.

En esa sesión del martes, el objetivo principal del Ejecutivo era hacer una salvedad para que no se procediera a la detención policial de familias que viven hace años en campamentos catastrados oficialmente por el Estado. Una indicación en ese sentido, presentada por el gobierno, fue acogida parcialmente por la derecha. Sin embargo, se hizo la excepción sólo para aquellas tomas que tuvieron un origen pacífico.

Abogada penalista de la Universidad de Chile y magíster en U. Alberto Hurtado, Elisabeth Matthei llegó al gobierno con el primer ministro de la Segpres de esta administración, Giorgio Jackson.

Si bien es cercana al ideario del gobierno, es independiente. Actualmente cursa un doctorado en la U. Diego Portales. Trabajó en las oficinas Boffil & Escobar, Lama abogados, Albagli & Zaliasnik y en el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH).

Uno de sus casos más conocidos es de 2021, cuando representó al INDH en la audiencia de formalización del sargento de Carabineros Juan González, quien en febrero de ese año dio muerte al malabarista Francisco Martínez, en Panguipulli. La postura que defendió en aquella oportunidad para pedir la condena del carabinero, sin embargo, no prosperó.

Una suerte distinta tuvo en otro de sus casos famosos. Mientras estuvo en el sector privado, defendió en 2019 a Gonzalo De la Carrera (hoy diputado de derecha) en la querella por injurias interpuesta por la entonces diputada Camila Vallejo (PC).

En ese caso, la exparlamentaria y hoy ministra perdió, al no presentar las pruebas en contra del actual diputado. Esa falla en la presentación fue detectada precisamente por el equipo de Matthei y César Ramos.

Incluso, al final, el Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago, también a solicitud de la defensa de De la Carrera, obligó a Vallejo a pagar las costas del juicio por un millón de pesos.