Parlamentarios de oposición piden salida de Chadwick tras revelación de mensajes a alcalde de Rancagua por fiscal Arias
Diputados y senadores señalaron, además, que esperan que el Ministro del Interior aclare sus mensajes con el alcalde Rancagua en el marco de la investigación que el Ministerio Público lleva sobre este tema.
Diversos parlamentarios opositores pidieron este miércoles la salida del ministro del Interior, Andrés Chadwick, tras conocerse en las últimas horas mensajes entre él y el alcalde de Rancagua, Eduardo Soto, en abril de 2017, incluidos en la investigación contra el fiscal Emiliano Arias.
En los mensajes, Chadwick -quien está oficiando como vicepresidente de la República debido a la gira del Presidente Sebastián Piñera a Asia- solicitaba al jefe comunal que respaldase públicamente al persecutor de O'Higgins tras un sumario abierto en su contra por el Fiscal Nacional, Jorge Abbott.
Esta situación, a juicio de la oposición, se suma a varios cuestionamientos que arrastra el titular de Interior, como su rol en el marco de la muerte del comunero mapuche Camilo Catrillanca, por lo que algunos dirigentes emplazaron al jefe de gabinete a dejar el cargo.
A juicio de la jefa de bancada del PPD y parlamentaria por la Araucanía, Andrea Parra, "esto es un golpe a la figura del ministro Chadwick, su cuenta corriente ya está sobregirada hace rato y esperamos que exista claridad sobre las investigaciones que se lleven adelante en torno a este tema".
"Nos parece que es absolutamente legítimo pensar hoy día que la figura del ministro Chadwick está profundamente dañada y que sería mejor para el país que él diera un paso al costado", indicó.
El diputado por Rancagua, Juan Luis Castro (PS), sostuvo sobre el caso que "la verdad es que todos los días se sabe algo nuevo. Las vinculaciones son delicadas, porque a pesar de no haber sido ministro de Estado en la época, sin embargo, ese intercambio va a tener que ser muy explicado en la comisión investigadora de la Cámara. La trama de Rancagua está cada día más tortuosa".
Su compañero de tienda, Jaime Naranjo, declaró por su parte que "es una situación muy compleja y delicada. Si bien es verdad que cuando él participó de estos hechos no era la primera autoridad de este país, mientras sí lo fue durante este gobierno, y ante consultas que se le hicieron sobre esta materia, él negó cualquier vínculo".
Complementando que "ahora al descubrirse y darse a conocer estos WhatsApp, donde él claramente está interviniendo, su credibilidad como autoridad ha quedado tremendamente cuestionada. Y creo que hoy su labor dentro del gobierno queda tremendamente debilitada y, por consiguiente, ante estos hechos, uno esperaría que el Presidente de la República tomara algunas medidas".
En tanto, el parlamentario comunista, Hugo Gutiérrez, aseguró que "lo que eventualmente realizó el actual ministro del interior, en cuanto a tener que hacer algún tipo de lobby ante el fiscal Arias para evitar algún tipo de investigación o eventual juzgamiento del acalde de Rancagua, señor Soto, también eventualmente cabe dentro de la figura ilícita del tráfico de influencias".
El parlamentario PC agregó que "espero que en su oportunidad Chadwick dé respuesta no solo a la prensa, sino también en la investigación que se está realizando por parte del Ministerio Público en relación a Arias".
Su compañero de partido, Boris Barrera, fue más duro, señalando que "creemos que (Chadwick) no cumple con el estándar ético para llevar a cabo su cargo, más hoy como vicepresidente. Creemos que no da garantías. Creemos que debiera renunciar, éticamente no debiera estar ahí (como ministro)".
Para la diputada Claudia Mix (Comunes), en la revelación de los mensajes entre Chadwick y Soto "hay un problema ético profundo. Tratar de obstruir la justicia a través de su influencia política. El ministro Chadwick debió renunciar hace rato. Tenemos el caso Catrillanca, donde vimos una mentira tras otra".
Mientras que desde el Senado, el presidente del Partido Socialista, Álvaro Elizalde, declaró que "esperamos que todos estos hechos sean esclarecidos, en el marco de la investigación que lleva adelante el Ministerio Público. Desde el punto de vista político es evidente que el primo del Presidente se ha transformado en un dolor de cabeza para el gobierno. Este no es el primer episodio en que el ministro Chadwick genera un problema serio de imagen para que gobierno de Sebastián Piñera".
Por su parte, el presidente del Partido Radical, Carlos Maldonado, criticó durante la mañana, previo a que el ministro Chadwick hablara con los medios y asegurara que sus mensajes con el jefe comunal de Rancagua era "algo circunstancial y ajeno a lo que se está investigando hoy", al titular de Interior.
"Sin duda el ministro Chadwick tiene que explicar detalladamente al país cuál es su relación con el fiscal Arias, por qué pidió apoyo público para él a una autoridad regional", indicó. Y se preguntó: "¿Cuál es la relación entre un actor político tan relevante, que además fue senador por la zona, con el Fiscal Regional en ejercicio? Se requiere una explicación detallada".
Cabe recordar que temprano, además, el ministro Segpres, Gonzalo Blumel salió a defender al jefe de gabinete, afirmando que los hechos que se denunciaban en contra de él, "ocurrieron cuando no era ministro, y como ministro ha cumplido sus deberes".
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