Rodrigo Albornoz, el DC que asoma para competir contra Orrego en la Región Metropolitana

La organización de la junta regional metropolitana de la Democracia Cristiana (DC) ha sido ripiosa -hasta el tribunal supremo puso orden esta semana-, pero está próxima a ver la luz.

Se espera que este sábado, a las 9.00 h, los militantes que integran la instancia lleguen hasta la sede de la colectividad, en el centro de Santiago, para desarrollar la sesión que tiene por objetivo “debatir sobre nuestra candidatura a la gobernación”, en consideración de la disconformidad que parte de la militancia ha hecho ver con el apoyo que la DC ha dado a la reelección de Claudio Orrego.

En la antesala, un grupo de -hasta ahora- 40 militantes -en la junta son 88- ha trabajado en la redacción de una carta que pretenden hacer pública al final de esa jornada. En ella, harán una solicitud a la directiva nacional, que encabeza el diputado Alberto Undurraga: que se prepare una candidatura DC en caso de que no se cumplan las condiciones electorales acordadas en la junta nacional, la máxima instancia de decisión partidaria. Y pretenden proponer un nombre para esa candidatura: el abogado y actual presidente Metropolitano del partido, Rodrigo Albornoz, conocido por su cercanía con Fuad Chahin -quien renunció al partido en 2022-.

Desde su entorno, aseguran que él no evadiría un encargo de este tipo si se lo solicita la junta regional.

El reclamo de este grupo de militantes responde a que, a comienzos de abril, Orrego, aceptó competir en cupo DC -partido al que renunció en 2022 luego de 33 años de militancia-. Pero puso una condición: ser la carta única del pacto Contigo Chile Mejor. Como no es claro que eso se pueda concretar -el PC y los Regionalistas Verdes han presentado candidatas-, la autoridad regional comenzó a juntar firmas para llegar a la papeleta como independiente. En consideración de eso, parte de la DC exige que el partido presente un candidato propio para competir contra él.

En el consejo nacional del martes, el diputado Undurraga explicó que “si el candidato del pacto es el actual gobernador Orrego, el acuerdo de la junta es que vaya con nosotros. Si el pacto no es completo, tendrá que haber un nuevo acuerdo de la junta. Tan simple como eso (...). Si finalmente el pacto (...) decide que quiere que (el candidato) sea el actual gobernador, nosotros preferimos que vaya con nosotros a que vaya con otros. Es bastante práctica la situación”.

En consideración del ruido que hay en torno a la figura de Orrego, algunos integrantes de la junta regional metropolitana han puesto sobre la mesa un voto político de esa instancia del 6 de abril -dos días antes de la junta nacional-, en que se acordó que “en caso de (...) que se dé un escenario de competencia entre las fuerzas que representan al gobierno y la DC o que la eventual candidatura no se dé con inscripción del partido, declaramos y manifestamos nuestra voluntad, capacidad y disposición a proponer una candidatura al gobierno regional”.

Los reparos de parte de la DC ante la candidatura de Orrego ya están instalados. Sin ir más lejos, el senador Francisco Huenchumilla, quien es el primer vicepresidente de la colectividad, dijo la mañana del jueves a Radio Pauta que Orrego “no puede pretender que lo sigan tratando como democratacristiano, él ya no lo es (...). Él se fue y nosotros vamos a resolver en función de nuestros propios intereses como partido desde el punto de vista estratégico de qué nos conviene hacer en las gobernaciones”.

Así, son varios los dirigentes que hoy consideran necesario reevaluar el apoyo a Orrego y abrirse a la posibilidad de respaldar a un militante. Una de ellas es la -también- vicepresidenta Ana María Hernández, quien dijo a este medio que ella ve con buenos ojos que un verdadero democratacristiano llegue a la papeleta. Aunque hay que esperar a que se desarrollen las negociaciones, advirtió.

El propio Albornoz afirmó ante el consejo nacional DC celebrado el martes que “hay una importante voluntad de los dirigentes territoriales de que esto (el mandato de la junta nacional) se aclare y si se cumplen o no las condiciones. Y si no se cumple, hay una voluntad política de la región de tener una candidatura de la DC, en un escenario de competencia”.

Por su parte, en esa misma instancia, el consejero nacional Nicolás Preuss hizo presente ante sus “camaradas” que “existió un acuerdo del consejo nacional y de la junta nacional, con relación a una inscripción de candidaturas únicas (de gobernadores) para el proceso de primarias (...). Eso no sucedió y, por lo tanto, ese escenario de candidaturas únicas de gobernadores del pacto está prescrito (...). Yo pido que se revise el tema de Claudio Orrego”.

En todo caso, la búsqueda de un “plan B” para competir contra Orrego no es algo inédito. El año pasado se sondeó a la exsenadora Carolina Goic. Preuss también logró posicionarse como precandidato, aunque finalmente desistió.