Luego de un intenso debate, la sala del Senado aprobó en general el proyecto que establece una multa para los electores que no sufraguen en las elecciones y plebiscitos. La sanción pecuniaria, según establece la moción de los senadores del Partido Demócratas, Ximena Rincón y Matías Walker, además de Luz Ebensperger (UDI) y Manuel José Ossandón (RN), es de 0,5 a 2 UTM, es decir, entre $ 33.000 y $ 200.000.

La discusión entre los senadores se centró principalmente en la idea de devolver el proyecto a la Comisión de Gobierno -presidida por Ossandón- para que se discuta en particular y se abra el espacio para las indicaciones que se quieran ingresan a la iniciativa.

Si bien Walker hizo la petición en medio del debate, esta no fue acogida por la sala. Sin embargo, tras un nuevo intento de su correligionaria Rincón, finalmente el hemiciclo acordó por unanimidad que el proyecto vuelva a la comisión, además de abrir un plazo para la presentación de indicaciones hasta el 24 de enero.

Para llegar a ese acuerdo, es que el ministro de la Secretaría General de la Presidencia, Álvaro Elizalde (PS), se acercó hasta la testera de la sala para dialogar con el presidente del Senado, José García (RN), y concordar una fecha. Además del timonel de la Cámara Alta, el ministro dialogó brevemente con Rincón y Walker. Además de ellos, quienes participaron de las conversaciones fueron Manuel José Ossandón y Luz Ebensperger.

En la discusión de fondo, el argumento vertido por quienes aprobaron el proyecto, fue la “validez” de las autoridades elegidas. El senador Javier Macaya (UDI), por ejemplo, sostuvo que “garantizar que una mayor cantidad de la población participe en las elecciones refuerza la validez y legitimidad del mandato de los gobernantes elegidos”.

Felipe Kast (Evópoli), en tanto, señaló que “es muy relevante que el deber ciudadano de comprometerse, de estudiar a los candidatos, de poder tener una vinculación con el país se ejerce y que tenga un costo el que no lo hace (...). Es verdad que este proyecto no va a solucionar los problemas de fondo, pero en el margen ayuda”.

Entre los contrarios, uno de los más duros fue el senador Francisco Huenchumilla (DC), quien fustigó que “aquí estamos teniendo un problema de doble estándar”. Junto con ello, aseguró que a la bancada democratacristiana “nos han visitado senadores de los dos lados dándonos muchos argumentos para que votemos en uno o en otro sentido”.

“¿Están mirando el interés del país, con un sentido de Estado, perfeccionar la democracia o están con la calculadora en la mano?”, cuestionó Huenchumilla.

Fidel Espinoza (PS), por su parte, argumentó: “Es relevante que tengamos voto obligatorio con multa para quienes no sufraguen, pero no podemos pasarnos de listos e incorporar a todo el mundo extranjero inmigrante que ha llegado al país (...). Que ellos vengan a determinar y a ser incidentes en la elección de un país, de un Presidente, no corresponde, debe haber requisitos muchos más profundos que ameriten llegar a ese paso”.

Como segundo proyecto en la tabla de este martes estaba el proyecto de reforma al sistema político que presentó un grupo transversal de senadores, encabezados por Alfonso De Urresti (PS).

El senador Daniel Núñez (PC) pidió tener una semana para generar un acuerdo amplio en torno a la iniciativa. “No quiero pedir aplazamiento de la votación porque es más agresivo”, dijo en su intervención. Sin embargo, la sala no dio la unanimidad para ello.

De Urresti, a su turno, señaló que “no tengo ningún inconveniente para acoger esa solicitud, pero estableciendo un plazo, que sea el primer proyecto que se vea en tabla el próximo martes”.

Minutos más tarde, a pesar de que Iván Moreira (UDI) dio la unanimidad, el presidente de la Cámara Alta señaló que, dado que la próxima semana dicha rama del Congreso se abocará al proyecto de pensiones, como mesa no pueden comprometerse a poner la reforma al sistema político como primer punto para el próximo martes.

Así, la sala acordó dejar dicha iniciativa en el último lugar de la tabla de este lunes. Sin embargo, dado que la discusión de los otros proyecto fue extensa, el hemiciclo no alcanzó a debatir sobre la reforma.

Por lo mismo, los senadores acordaron dejar dicho proyecto para el martes de la próxima semana, previa ratificación de la reunión de comités de los lunes. Aunque el reglamento del Senado indica que un proyecto que tenga segunda discusión y que no alcance a votarse, debe hacerse en la sesión siguiente -es decir, esta jornada-, en la reunión de comités de este lunes esto no se previó, por lo que la iniciativa se votaría la próxima semana.