El ex presidente de SalmonChile, la principal asociación gremial de las productoras y distribuidoras de salmón chileno, el agrónomo y economista César Barros está de vuelta en la industria acuícola.

Hace un mes, Barros comenzó a asesorar al fondo inglés Fidera, el que ingresará a la salmonera Nova Austral, empresa cuya propiedad es controlada por los fondos Altor Fund III y Bain Capital. Esto luego de que en medio de su reorganización judicial, los británicos adquirieran los bonos que mantenía Moneda Asset Management, Fratelli Investments, sociedad ligada a la familia Solari Donaggio, y el banco noruego DNB.

Según personas que participan en el sector, en las últimas semanas César Barros ha sostenido reuniones con ejecutivos de la industria, quienes se han mostrado conformes con su regreso y le han manifestado su preocupación por los problemas que enfrenta el sector.

Nova Austral es una de las principales salmoneras que opera hace más de 15 años en la región de Magallanes. Sin embargo, la compañía a traviesa un complejo escenario tras arremetida que lanzó en su contra la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA).

El 6 de julio de 2022, el regulador aplicó una histórica sanción a la salmonera, revocándole los permisos ambientales de tres centros de cultivo. Esto debido a una serie incumplimientos graves de sobreproducción que provocaron un daño ambiental en el Parque Nacional Alberto de Agostini, en la comuna de Cabo de Hornos, Región de Magallanes.

Pero la debacle escaló cuando el 22 de junio de 2023 Nova Austral solicitó al Primer Juzgado Civil de Letras de Porvenir su reorganización judicial, detallando pasivos por US$560 millones. En su presentación, la compañía asesorada por el estudio Carey detalló así los motivos que la llevaron a su reorganización: el endurecimiento del estándar fiscalizador; la falta de reconocimiento de las mejoras operacionales de la compañía; la invalidación de autorizaciones para relocalizar centro de cultivo y la emergencia sanitaria producto de la pandemia del Covid-19 en Chile.

Posteriormente, el 17 de enero de 2024, los acreedores lograron un acuerdo para la viabilidad de la salmonera con la aprobación de la propuesta de reorganización, siete meses después ingresar la solicitud para aquello.

Pero volvieron los problemas, luego que dos acreedores lo impugnaran: Inversiones Dalcahue Limitada y Nutreco, productor holandés de nutrición animal y alimentos para peces a través de Skretting. Ambas insisten en que el acuerdo de reorganización tendría cláusulas discriminatorias. A la fecha, aún no se resuelve la impugnación, y, según conocedores del proceso, se resolvería la segunda quincena de abril.

Una vez que se resuelva este asunto, el fondo inglés Fidera junto a un grupo de bonistas nacionales tomarían el control de Nova Austral con el compromiso de efectuar una fuerte inyección de capitales para fomentar su crecimiento.

Las fuentes consultadas destacaron que en este punto radica la relevancia de César Barros para los ingleses. Esto debido a que es reconocido ampliamente entre ejecutivos y empresarios salmoneros por su conocimiento de la industria y su rol de estratega frente a conflictos.

En marzo de 2007, el ingeniero agrónomo de la Universidad Católica y doctor en economía de la Universidad de Stanford asumió como presidente del directorio de la Asociación de la Industria del Salmón de Chile A.G (SalmonChile), en reemplazo de Carlos Vial Izquierdo. En ese cargo se desempeñó hasta junio de 2011.

Quienes lo conocen destacan que Barros está acostumbrado a navegar por aguas turbulentas. De hecho, luego de su periodo gremial en la industria salmonera asumió el cargo de director y presidente de La Polar, multitienda que por aquellos años enfrentaba una grave crisis por las repactaciones unilaterales.

En SalmonChile, Barros tomó el timón de la asociación en medio de acusaciones por malas prácticas laborales en el sector, además de presiones ambientalistas. Durante su gestión también enfrentó la grave crisis financiera y sanitaria provocada por el brote de virus ISA.

“A raíz de la caída del Silicon Valley Bank (SVB), Credit Suisse y un par de bancos más, surgen preguntas y dudas sobre la regulación bancaria, su tamaño y el riesgo moral que conllevan los salvatajes de los depositantes. A las zapaterías, salmoneras y agricultores en problemas, nadie les asegura su financiamiento: se pone riesgosa su actividad (como pasó con el virus ISA en la salmonicultura, las sequías y alza de insumos al triple en la agricultura, por dar solo un par de ejemplos) y la banca les retira su protección, quebrando un montón de empresas (lo vimos recién con la industria de la construcción)”, recordó Barros en una reciente columna publicada por La Tercera.

A sus cercanos, el asesor del fondo inglés se ha mostrado firmemente convencido del futuro de la industria salmonera en Magallanes, lugar que ofrece prístinas aguas y menores riesgos sanitarios. A la fecha, en la zona operan Blumar, Australis Seafoods, AquaChile, Multi X y Cermaq.