Después de años de evitar a las dos compañías automotrices más grandes de EE.UU., los inversionistas finalmente están comenzando a patear los neumáticos de General Motors y Ford.

Las acciones de Ford han subido alrededor del 20% esta semana y han subido alrededor del 35% en enero, lo que marcaría su mejor mes desde abril de 2009. El movimiento de esta semana siguió a un informe de Deutsche Bank que sugiere que Ford podría ofrecer una perspectiva de ganancias más brillante de lo esperado para 2021 cuando informe las ganancias del cuarto trimestre el 4 de febrero.

El precio de las acciones de GM también ha subido un 35% este mes, a un nivel récord desde que las acciones comenzaron a cotizar en 2010, luego de la quiebra del gigante automotor un año antes. El salto se ha producido en medio del entusiasmo por los planes de vehículos eléctricos de GM y la inversión de Microsoft Corp. esta semana en Cruise, la división de vehículos autónomos de propiedad mayoritaria de GM.

Los inversionistas esperan movimientos de valores de dos dígitos de Tesla Inc. y un grupo de nuevas empresas de vehículos eléctricos que se han hecho públicas durante el último año. Pero hasta hace poco, los fabricantes de automóviles de Detroit no se habían beneficiado mucho de la fijación de Wall Street con los autos eléctricos y sin conductor.

El desempeño de las acciones de GM y Ford ha sido inferior al del índice S&P 500 en cada uno de los últimos cuatro años, a pesar de los períodos de ganancias récord para cada compañía.

Mientras tanto, las acciones de Tesla subieron más de ocho veces solo en 2020, lo que ayudó a generar una afluencia de dinero en las acciones de vehículos eléctricos que han impulsado las valoraciones de algunas empresas sin ingresos más allá de las de Ford y otros fabricantes mundiales de automóviles.

Los inversionistas se han sentido atraídos por las empresas de vehículos eléctricos y los fabricantes de baterías debido a sus embriagadoras perspectivas de crecimiento, dicen los analistas. Los automóviles eléctricos representaron alrededor del 3% de las ventas mundiales de vehículos en 2020, según Bernstein Research, y los analistas esperan que esa participación crezca mientras que las ventas de vehículos a gasolina y diésel disminuyen.

Pero los inversionistas han tendido a descontar a los fabricantes de automóviles heredados, a pesar de la gran experiencia en ingeniería y los miles de millones de dólares en inversiones en vehículos eléctricos, viéndolos atrapados en una industria cíclica y de capital intensivo que históricamente ha producido márgenes de ganancia de un solo dígito.

Los movimientos recientes apuntan a un nuevo interés de los inversionistas en las apuestas tecnológicas que están haciendo GM y Ford, dicen los analistas.

Se espera que el entusiasmo de los inversionistas por los vehículos eléctricos dure hasta bien entrado este año, impulsado por el apoyo del presidente Biden a las estaciones de carga eléctrica y otras propuestas para acelerar la adopción de automóviles enchufables, dijo el analista de Barclays, Brian Johnson en una nota de investigación el mes pasado.

La semana pasada, los inversionistas aplaudieron la formación de una nueva unidad de negocios de GM para vender furgonetas eléctricas y servicios a empresas de reparto comercial, incluida FedEx Corp. El señor Johnson de Barclays afirmó que el negocio, llamado BrightDrop, tiene el potencial de alterar el mercado de vehículos comerciales y logística de entrega.

Varios analistas han dicho que los planes de vehículos eléctricos de Ford están detrás de los de GM, que en noviembre dijo que aumentaría el gasto en vehículos eléctricos en aproximadamente un tercio, a US$27.000 millones hasta mediados de la década. Eso es mucho mayor que el gasto que Ford ha descrito, aunque los analistas esperan que la compañía revele planes de inversión actualizados esta primavera.

Aún así, las acciones de Ford se han elevado luego de los planes revelados recientemente para su propia camioneta de carga eléctrica y una versión enchufable de la camioneta F-150, su mayor fuente de ingresos. Recientemente, comenzó a vender su primer modelo eléctrico estadounidense en muchos años, el vehículo utilitario deportivo Mustang Mach-E, que ha recibido elogios de los críticos de automóviles.

Ford también se benefició del rally de vehículos eléctricos como accionista de la startup Rivian Automotive LLC, que esta semana recaudó US$2,65 mil millones, a una valoración de US$27,6 mil millones. Ford invirtió US$500 millones en Rivian en la primavera de 2019.