Aston Martin se suma a carrera por autos eléctricos en China

Para los principales fabricantes de automóviles del mundo que se proponen sumarse a la carrera de vehículos eléctricos, es muy difícil resistirse a China.

Aston Martin, la legendaria marca británica inmortalizada en las películas de James Bond, está buscando una empresa conjunta en China para poder entrar al mercado mundial más grande para los vehículos eléctricos, dijo el máximo responsable, Andy Palmer. Pero Aston Martin no es el único, Magna International, fabricante canadiense por contrato, está en negociaciones con Beijing Automotive Group para formar una alianza, dijeron personas al tanto del tema.

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En plena transformación de la industria automotriz hacia los vehículos propulsados por baterías y los autos autónomos, los grandes fabricantes se preparan para desafíos que incluyen miles de millones de dólares de inversión con rendimientos inciertos. China, que en 2015 sobrepasó a los Estados Unidos como el mercado más importante para los vehículos eléctricos con subsidios gubernamentales y regulaciones estrictas en materia de emisiones, ya se ha convertido en un destino atractivo para fabricantes que van desde Volkswagen AG hasta Ford Motor Co.

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"El tamaño del mercado determina todo", dijo Zhou Jincheng, analista de la firma de investigación del mercado automotor Fourin. "Para poder seguir teniendo una presencia en el mercado, están dispuestos a retirar algunas de las ganancias de sus vehículos tradicionales para invertir en vehículos eléctricos, que podrían no ser rentables hasta 2025 o 2030".

Aston Martin Holdings Ltd. no tiene planes de producir en China vehículos eléctricos que lleven la marca del Reino Unido, pero sí busca colaboración para compartir sus materiales livianos y sus tecnologías aerodinámicas con el socio chino en momentos en que el país asiático se propone mejorar el rendimiento de los vehículos eléctricos, dijo el máximo responsable Palmer. Ya están en negociaciones con automotrices consagradas y empresas emergentes, dijo en Pekín.

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Pero otros se han unido a compañías locales para fabricar en China. Se espera que este año Volkswagen lance el primer auto eléctrico fabricado localmente a través de una alianza con Anhui Jianghuai Automobile Group Corp., mientras que Ford, por su parte, se asoció con Anhui Zotye Automobile Co. para fabricar y vender una línea de vehículos eléctricos.

Las ventas de vehículos con nuevas energías en China podrían superar las 700.000 unidades en 2017 y 1 millón en 2018, según la Asociación China de Fabricantes de Automóviles.

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El miércoles, Aston Martin anunció una iniciativa de comercio e inversión a cinco años por un valor de más de 600 millones de libras (US$856 millones). La compañía importa actualmente modelos como el Vantage para vender en China.

El fabricante de baterías chino Contemporary Amperex Technology Ltd., o CATL, figura en una lista de proveedores de baterías que Aston Martin está considerando para su primer auto deportivo eléctrico, dijo Palmer. Algunas regulaciones específicas sobre las baterías han dado a China una ventaja competitiva respecto de los proveedores locales.

En el caso de Magna, las discusiones varían de una asociación a partes iguales con Beijing Auto hasta la cooperación en áreas como fabricación y suministro de piezas, dijeron las personas, que pidieron no ser nombradas dado que las negociaciones son privadas. Beijing Auto es propietario de Beijing Electric Vehicle, o BJEV, el fabricante más grande de vehículos eléctricos de China.