Bono de Enjoy renta a dos dígitos en el año, pero mercado advierte que ya no quedan oportunidades
La clave está en el prepago de las serie E y C. Ahora queda la F, que no tiene posibilidades de ganancia de capital.
Cuando logran mejorar su situación, las empresas aproblemadas se convierten en buenas inversiones. Y ese ha sido el caso de la deuda de Enjoy, mirando las rentabilidades de bonos corporativos en lo que va del año.
A principios de abril, antes de que salieran del mercado por el prepago que lo afectó, los bonos de la serie E de la operadora de casinos lideraban por amplio margen las rentabilidades (ver gráficos), con una ganancia 11,29% acumulada en poco más de tres meses según cifras de RiskAmerica.
[ze_adv position="adv_300x100" ]
Según comentan desde el mercado, la rentabilidad del bono es el resultado del resurgimiento que tuvo la compañía después de la entrada del fondo internacional Advent.
El papel de Enjoy, explica Andrés de la Cerda, gerente de renta fija y monedas de BICE Inversiones, "partió el año muy castigado antes de que se resolviera el tema del aumento de capital y la entrada del fondo".
Efectivamente, los papeles BENJO-E, los más líquidos al cierre de 2017, operaban al finalizar diciembre con un valor par de 100,64%. Esta semana, los papeles operaban con un precio de 110%.
La tasa también vio un cambio radical, pasando de 4,04% en diciembre a 2,57% antes del prepago y a 0,95% actualmente.
Parte del ordenamiento que hizo la firma incluyó una reestructuración de la deuda, en la que se prepagaron los bonos de las serie C y E, papeles que "tenían tasas de prepagos bastante inferiores a las tasas de valorizaciones" según comenta Matías Gómez, analista de renta fija de Ameris Capital. Esto lo que explica la alta rentabilidad del bono, explica.
A mediados de enero de este año, después de concluir negociaciones que databan del 2015, el operador de casino finalizó el aumento de capital que permitió la entrada del fondo de inversión Advent.
[ze_adv position="adv_300x250-A" ]
La operación, que involucró el ingreso de US$116 millones, significó que la familia Martínez redujera su participación al 28,7% y el vehículo estadounidense obtuviera un 32% del control de la compañía.
Ahora, mirando hacia adelante, pese a que las condiciones para la compañía son favorables, no hay alternativas para los inversionistas que quieran tomar posiciones en estos bonos.
Es decir, "pasó la vieja".
Enjoy tiene buenas perspectivas para el futuro, señala Gómez, gracias a este plan de desapalancamiento, lo que significa que podrá endeudarse a tasas más convenientes para financiar sus próximas inversiones.
"Sin embargo, está en pleno proceso de licitación de casinos municipales que significan necesidades directas de inversión (para ganar y/o mantener las licencias) junto al riesgo de perder licencias actuales que impactarían directamente en sus flujos futuros", advierte.
Además, está el problema de los bonos que quedaron disponibles después de los prepagos son los de la serie F, con una duración de dos años, que tienen una baja liquidez.
Dado que la tasa de prepago está por sobre su valorización, en Ameris Capital recomiendan no tomar posición en el papel.
Aunque desde BICE destacan que el papel "tiene un spread atractivo", en torno al doble de los títulos con la mejor clasificación de riesgo -los bonos de Enjoy tienen una "nota" crediticia de BBB- en ICR y de BBB en Humphreys-, De la Cerca concuerda con el diagnóstico.
La serie F tiene una tasa de prepago de UF + 6%, explica el ejecutivo, lo que limita su capacidad de bajar la tasa y de obtener ganancias de capital. "El que tenga este papel es imposible que lo venda", acota.
Es más, en lo que va del año, el bono BENJO-F ha rentado sólo un 2,32% según cifras de RiskAmerica, muy por debajo de lo que rentó la serie E hasta el 6 de abril.
Comenta
Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.