La discusión de un quinto retiro de fondos se tomará el Congreso esta semana. Mientras el gobierno se opone a un nuevo rescate, aún hay dudas sobre cómo votarán algunos parlamentarios oficialistas en la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados. En este escenario, la bolsa de Santiago cerró a la baja, ante la incertidumbre que produce la tramitación del proyecto, y las implicancias económicas que podría tener.

El IPSA retrocedió un 1,00%. El principal indicador quedó en 4.919 puntos. Este es su menor nivel desde el pasado 30 de marzo.

“Se mantiene una alta incertidumbre ante la probabilidad de un nuevo retiro de los fondos de pensiones, que en esta oportunidad haría aumentar la inflación y las tasas”, dijo Guillermo Araya de Renta 4.

Algo con lo que coincide José Tomás Riveros de Capitaria, quien señaló que “mañana tendremos noticias, respecto al quinto retiro. La comisión constitucional votara la iniciativa de legislar esta propuesta. Si vemos una aprobación, esto podría dar indicios de una mayor aceptación de la iniciativa en la cámara de diputado, y el senado. Este proyecto, genera bastante incertidumbre para el mercado, y el sistema de pensiones”.

Esta iniciativa es vista como una prueba de fuego para el equipo económico del gobierno, que en reiteradas ocasiones ha dicho que un nuevo retiro no es parte del programa con que llegaron a La Moneda.

Los mercados globales también finalizaron a la baja. La preocupación estuvo puesta en los pasos que podría tomar la Reserva Federal con respecto a las tasas de interés en Estados Unidos.

Así, los principales indicadores de Wall Street cerraron con caídas superiores al 1%. Los mercados de Europa terminaron mayoritariamente en terreno negativo, con la mirada puesta en la inflación y en las decisiones de los principales bancos centrales.

“El estricto plan de confinamiento que se está llevando a cabo en Shanghai y que ya cumple dos semanas de aplicación, está afectando las expectativas de crecimiento tanto de China, como del resto del mundo”, señaló Araya.

En este escenario, el petróleo retrocedió. Al cierre de esta edición, el WTI caía un 3,49% a US$94,83 por barril, mientras que el crudo Brent caía un 3,66% a US$99,04 por barril. Esto ante el efecto que podría tener la situación de China sobre la demanda.