Elizabeth Nieto: "Una organización que es buena para mujeres, lo es para todos los empleados"
"Ayudar a las mujeres a entender que ser ambiciosas y querer tener más poder, es aceptable". Con estas palabras, Elizabeth Nieto, la Vicepresidente Senior de Diversidad e inclusión en MetLife a nivel global, recalca la importancia de crear instancias dentro de las organizaciones, a través de herramientas concretas y específicas, para aumentar la participación laboral femenina e impulsar sus habilidades de liderazgo.
Elizabeth Nieto, en su visita a Chile, se refirió al trabajo interno y externo que está llevando a cabo ProVida, una compañía MetLife, en el marco de su Programa ProVida Mujer, a través de alianzas con fundaciones e instituciones. "Es una organización que se ha comprometido con el tema de la diversidad y, de a poco, vemos los frutos de ese trabajo", aseguró.
¿Cuál es la posición de la compañía MetLife frente a los temas de diversidad e inclusión?
En 2012 comenzamos con la estrategia de diversidad e inclusión a nivel mundial, y nuestra meta fue y continua siendo incrementar la participación de mujeres en los ámbitos de liderazgo. Para esto, creamos iniciativas específicas para cada uno de los países según las estructuras sociales, educacionales y las necesidades de cada país.
En el caso de Chile, continuamos revisando las políticas y prácticas internas de inclusión, así como el progreso de la sociedad de las organizaciones gubernamentales, académicas y privadas. De esta forma, nos aseguramos que el talento femenino tendrá acceso a oportunidades laborales y al desarrollo.
¿Qué proyectos o iniciativas destacaría al respecto?
Nosotros en MetLife hemos trabajado con todos los procesos de recursos humanos, desde la manera en que describimos las posiciones, hasta la forma en que hacemos reclutamiento, desarrollo, retención y promoción.
En ese proceso, hemos mejorado la forma en que escribimos los requerimientos de un trabajo, basándonos más en las competencias y habilidades que pueden ser transferidas, y no solamente en las capacidades que tenían las personas que estaban en el cargo anteriormente. Miramos el proceso de desarrollo y cuando hay oportunidades de crecimiento, estas son ofrecidas tanto a mujeres como a hombres.
Por otro lado, otro de los trabajos que hacemos, es asegurarnos de que las mujeres exitosas, que han logrado mantener e integrar su vida familiar y laboral, sean reconocidas por los líderes de la organización y el resto del equipo conozca sus avances.
¿Cómo definiría la realidad internacional actual, en relación a los desafíos de diversidad e inclusión?
Hemos trabajado en este tema durante más de 20 años y, al mirar las estadísticas, la proporción de mujeres CEOS es bastante pequeña. Sin embargo, logramos avanzar mucho en diferente ámbitos y estamos cambiando estructuras que han existido por cientos de años.
Nuestro directorio en MetLife, organización mundial, ha tenido un 30% de mujeres durante más de 10 años. Es una íorganización que se ha comprometido con el tema de la diversidad y, de a poco, vemos los frutos de ese trabajo. Ahora que hemos logrado incrementar la participación de género, tenemos que pensar en las personas con discapacidades, en gente joven, grupo étnicos y en cada uno de los países tenemos que ver cuáles son las otras oportunidades de incrementar la representación de grupos sociales que no están incluidos
¿Cómo analizaría Chile respecto a lo anterior?
Desde hace más de 20 años que he estado visitando Chile y trabajando en la región. En estos tres días he observado a la gente que está en este país y aprendiendo de todas las actividades que están surgiendo, basadas en una agenda enfocada a la mujer, que sigue evolucionando.
Hay nuevas áreas, investigaciones y representaciones de mujeres en directorios, que me han dejado bastante ambiciosa de las posibilidades que tiene Chile, de seguir progresando.
¿Cuál cree que es la clave para enfrentar, al interior de las organizaciones, el cambio que estamos viviendo en Chile y en el mundo, respecto a la equidad de género?
Como todo proceso de negocio, tenemos que entender cuáles son los obstáculos y las barreras que tenemos que solventar. En el tema de la inclusión, hay dos tipos de barreras: las estructurales, que se solucionan con cambios en la legislación, y las organizacionales, que es lo que cada corporación tiene que hacer, internamente, para crear un ecosistema de inclusión.
La mirada que tenemos en MetLife, es que tenemos que trabajar con estos dos ámbitos: ayudar a las mujeres a entender que ser ambiciosas y querer tener más poder, está bien, es aceptable, y crear una estructura en la organización, que les permita a las mujeres, a través de procesos específicos y transparentes, saber que sus contribuciones son reconocidas y valoradas dentro de la organización.
¿Qué le parece la iniciativa del Programa ProVida Mujer, desarrollado por AFP ProVida, que busca mejorar la situación previsional de las mujeres, a través de alianzas estratégicas con instituciones y fundaciones?
Me parece una iniciativa maravillosa y, de hecho, les dije a mis compañeros de ProVida, que quiero transformarme en la embajadora de esta iniciativa, dentro de nuestra propia organización, en el exterior. Lo que han logrado hacer, no ha ocurrido en otros países, que es entender al cliente y crear soluciones amplias, lo que explica por qué está involucrada la gente de marketing, de comunicaciones de recursos humanos y de relaciones gubernamentales.
Por otro lado, han logrado crear un compromiso internamente y una sensación de propósito de nuestros propios empleados, de saber que estamos haciendo cosas importantes para el cliente, pero también para que ellas se puedan beneficiar de trabajar en una organización que le interesa mejorar la situación de las mujeres en Chile.
¿Qué le diría a las mujeres que trabajan actualmente en ProVida, para que se motiven a ser impulsoras y embajadoras de la equidad de género, al interior de la organización?
Vine hace cuatro años a Chile, después de la alianza de ProVida y MetLife, y he visto cómo ha evolucionado la organización de mujeres, en relación a su compromiso y entendimiento, respecto a cómo pueden empoderarse e influenciar en la organización.
Mi mensaje es que sigan trabajando duro. El liderazgo de ProVida está super comprometido con mejorar las oportunidades y el desarrollo de mujeres y hombres. Siempre decimos que una organización que es buena para mujeres, lo es para todos los empleados. Sigan colaborando y mándenme ideas, para así mejorar la experiencia de cada uno de los empleados.
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