FNE recomienda medidas para asegurar el acceso a información útil a consumidores que quieran optar a ser clientes libres
La agencia que promueve la libre competencia ve necesario incorporar información sobre los costos adicionales a la energía para aquellos clientes que migren al régimen libre, junto a la realización de capacitaciones a clientes elegibles, además de otros mecanismos de difusión.
La Fiscalía Nacional Económica (FNE) recomendó al Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) considerar medidas complementarias en el marco del informe que debe emitir, tras la consulta presentada en diciembre por el Ministerio de Energía, para rebajar el límite de potencia para que los usuarios finales puedan optar entre un régimen de tarifa regulada o ser clientes libres.
La reducción del límite desde 500 kW a 300 kW permitiría ampliar el universo de clientes elegibles, cuya potencia conectada va entre 500 y 5.000 kW, ya que sobre dicho nivel, la normativa legal confiere a los consumidores la aptitud para negociar sus contratos de suministro eléctrico por sí mismos.
En su informe que acompañó en la consulta, la FNE remarca que “el cambio de umbral planteado en la solicitud no debería producir mayores efectos en los mercados de clientes regulados y libres, ya que su alcance sería acotado y no se observan aspectos de la estructura del mercado que justifiquen una postura contraria”.
Sin embargo, el documento subraya que pueden existir riesgos en caso de rebajarse el umbral, principalmente por las asimetrías de información de los nuevos clientes con derecho a opción, además de sesgos conductuales que podrían llevar a la toma de decisiones ineficientes.
En particular, advierte que los clientes elegibles “podrían sufrir de ‘miopía’, concepto acuñado por la economía conductual para referirse a aquella situación que impide al consumidor ver con claridad las consecuencias futuras de las decisiones que se toman en el presente”, especialmente porque los precios para los clientes libres pueden ser mayores a los precios del segmento regulado.
En particular, existen cargos adicionales al costo de la energía que “podría dificultar la evaluación económica de la conveniencia de cambiarse de un régimen regulado a un régimen libre, en la medida que éstos no sean claros ni previsibles para el cliente”.
En esa línea, la FNE propuso al TDLC incorporar en su informe medidas complementarias para reforzar el acceso a información útil a la hora de tomar la decisión de cambio de un esquema a otro por parte de los clientes elegibles. Entre ellas, considera la publicación de nuevos indicadores de precios, la incorporación de deberes de información sobre los costos adicionales a la energía existentes en el régimen libre, la creación o ampliación de un registro de estos nuevos clientes y la realización de capacitaciones u otros mecanismos de difusión.
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