Santiago 2041: hablan las personas




"Quisiéramos derribar barreras de desconfianza. Entender que los problemas de la ciudad no son culpa de las autopistas, de las antenas de celulares, de las inmobiliarias: son problemas que se producen por las virtudes de la ciudad. No creemos que vamos a tener un mundo feliz de un día para el otro, pero ponemos la mesa para discutir la idea de que ojalá Santiago llegue a ser la ciudad ojalá con mejor calidad de vida de América Latina en 2041".

Esa es la expectativa del arquitecto Pablo Allard, uno de los anfitriones del foro Santiago 2041, para la cuarta versión del encuentro, que será el 23 de julio en CasaPiedra.

"El motivo y énfasis de este año está en incorporar la visión ciudadana y el factor humano en la planificación de la ciudad. Esto requiere reforzar la idea de que la ciudad la construimos todos, por lo  que cada actor es relevante a la hora de proponer y materializar el desarrollo sostenible de Santiago", agrega Rodrigo Álvarez, presidente de Copsa.

Allard, quien es también el decano de la facultad de arquitectura de la UDD, piensa que el foro ha logrado consolidarse. "No esperamos resultados inmediatos. Son plazos más allá de los tiempos electorales. Son temas complejos, porque la ciudad es compleja, entonces hay que tener eso en cuenta. Pese a ello, entre los méritos del foro es que ha logrado crear un nicho y  consolidarlo para que anualmente se de una conversación con todos los agentes involucrados y bastante neutral, porque no se toman posiciones políticas. Es un espacio de diálogo importante para los temas de ciudad. Y la segunda meta que hemos logrado es instalar algunos temas. El año pasado hicimos una propuesta de tarificación vial por congestión para el sector de El Golf, que sirvió para que las autoridades vayan sumando más antecedentes para avanzar en esa línea", dice.

Además, según Rodrigo Álvarez, "se ha logrado el compromiso de las diferentes empresas que, cada año, organizan el Foro, además de la Universidad del Desarrollo y Copsa, Siemens, IBM y el Grupo Enersis. Cada una de estas entidades desarrolla diferentes proyectos y tecnologías pensadas para el desarrollo de las ciudades, lo que evidencia que el rol del mundo privado es clave para ello. Por supuesto, nos interesa extender la invitación para que más empresas se interesen en la urgencia de estos temas y que podamos ampliar la diversidad de visiones al respecto. Por su parte, la autoridad siempre ha demostrado su especial interés, contando desde el primer año con su asistencia y participación en las discusiones planteadas".

En la historia del foro, el primer año fue para hacer un diagnóstico de cuáles eran los temas fundamentales que tendría que enfrentar Santiago de cara a los próximos 30 años, por los 500 años de su fundación. El segundo año, presentaron indicadores. El tercer año fue el de las propuestas y este año es el de la ciudadanía. "Por eso se llama Humanizando la ciudad. Lo que queremos es ver los temas de ciudad no solamente son responsabilidad del estado, sino de cada uno de nosotros", agrega Allard.

Respecto a esta edición, habrá tres paneles. El primero es con las empresas convocantes que mostrarán cómo ellos están cada vez más atentos a las demandas de las personas. En el segundo panel, será el turno de las organizaciones ciudadanas, "las que están preocupadas no sólo de fiscalizar, sino también de proponer", dice Allard y se refiere a Conadecus, Odecu, Asociación de Automovilistas, Happy Ciclistas y Ciudad Viva.

Para cerrar, será el turno de los municipios. Están invitados cuatro alcaldes que representan las distintas ciudades que hay en Santiago: Providencia, Vitacura, Puente Alto y Huechuraba. "Los liderazgos locales duran más que los liderazgos nacionales y tienen más tiempo para trabajar la ciudad. Tenemos dos municipios urbanos, centrales con sus problemas de primer mundo, con Josefa Errázuriz instalando la idea de un gobierno más participativo, con cabildos abiertos, y está experimentando si ese modelo de liderazgo va a ser efectivo. Por otro lado, Vitacura tiene otros problemas de primer mundo, que tienen que ver con promover la sustentabilidad en su comuna, por otro lado es la comuna que tiene más autos per cápita en Chile. Luego, dos comunas emergentes, pero mucho más complejas. Huechuraba con Carlos Cuadrado, que enfrenta problemas de crecimiento y tiene desafíos enormes desde el punto de vista social y cómo lidiar con esta clase media emergente, en lo que antes fue una zona rural. Y, Puente Alto, la madre de todos los desafíos comunales. Por eso se llama humanizando las ciudades. Se tiende a visibilizar mucho las tensiones y los conflictos, pero finalmente la ciudad está hecha de personas de bien", termina Allard.

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