Nadie sabe lo que pasa ni sé cómo contarlo: Los mensajes de adolescentes LGBTI+ en busca de ayuda

PROYECTO TODO MEJORA

"Siento odio por mí mismo". "Solo tengo la idea de morir". "No me siento cómodo con mi cuerpo, mi voz, mi todo". Esta es la historia de los mensajes adolescentes que buscan ayuda para superar momentos que parecen muy oscuros.


Una niña de 16 años abre una aplicación de celular desde su casa. Se llama Hora Segura y le permitirá conversar de manera anónima y gratuita con un especialista. Ella tiene problemas y necesita ser escuchada. Acá tiene una primera opción. Entonces escribe.

"Nadie sabe lo que pasa, ni sé cómo contarlo. En toda mi vida he pasado por tres colegios; en el primer colegio me hicieron bullying por casi siete años seguidos y me intentaron violar; en mi segundo colegio me hicieron ciberbullying y, ahora, todo está de mal en peor, quiero huir y no sé cómo, me corto. Me intenté matar, pero no tengo el valor, ya no sé el propósito de mi vida, estoy perdiendo a gente que quiero demasiado y es horrible. No sé si pueda seguir aguantando".

Otro joven de 13 años tiene muchas dudas. Desde hace tiempo que no se siente cómodo con su cuerpo y ha debido ocultarlo. No tiene confianza para hablar de eso con conocidos. El silencio le permite protegerse de intimidaciones en el colegio. Pero siempre necesita hablar. Mejor si puede hacerlo sin dar su nombre. Sin ser juzgado. Para eso cuenta con un celular.

"La cosa es que creo que soy trans. Y no sé si decírselo a mis padres. Tengo 13 y desde los ocho años me he planteado esto. Espero que me puedan ayudar. Estoy inseguro de contárselo a mis padres, ya que tengo miedo de cómo puedan reaccionar. Espero que me den consejos y que me ayuden".

La persona que está detrás del chat le responderá. Le recomendará empezar por hablar con algún familiar sobre lo que está pasando y luego acercarse a un especialista para iniciar su transición.

***

El programa Hora Segura fue creado por la Fundación Todo Mejora en 2015 para intentar dar respuesta a un problema poco trabajado por la salud en Chile: la prevención del suicidio y del bullying en la comunidad LGBTI+.

La iniciativa nació de varios especialistas de la fundación al darse cuenta de que a su página en Facebook llegaban muchos testimonios de personas que necesitaban apoyo psicológico y siquiátrico. Entonces idearon una aplicación gratuita para promover el bienestar en niños y niñas afectados por discriminación por su identidad de genero. Hoy, casi 10 mil personas usan la plataforma todos los días, siendo la única forma de atención especializada de este tipo en Chile. En cambio, en Europa y Estados Unidos este tipo de intervenciones, aprovechando la tecnología, son comunes en programas de salud pública y privada.

"Hasta el día de hoy hay baja oferta programática en materia de orientación sexual, identidad y expresión de género, específicamente en salud y en educación. Nosotros creamos esta fundación para eso", cuenta el director ejecutivo de Todo Mejora, Diego Poblete.

La aplicación actualmente funciona de lunes a viernes, de 13.00 a 14.00 y de 18.00 a 0 horas. Los fines de semana, cuando más reciben mensajes, está activa de 19.00 a 23 horas. Hora Segura funciona por el trabajo de 75 voluntarios capacitados para responder todos los mensajes que llegan. Son 45 horas a la semana de atención gratuita para jóvenes de todo el país.

A Hora Segura se puede acceder por un correo institucional, el chat de Facebook y de la página web, además de la aplicación. La mayoría de los niños lo hacen desde sus celulares. En el último año se registraron 8.714 consultas, la mayoría de ellas desde la Región Metropolitana. Una de las grandes falencias del proyecto tiene que ver con las zonas más alejadas de país. En las regiones de Arica y Parinacota y de Aysén casi no llegan mensajes.

Esta iniciativa es inédita en Chile. El Ministerio de Salud tiene un teléfono con atención las 24 horas del día, pero que está pensada en diagnóstico de enfermedades y no en prevención. Además, tiene otro problema importante: el acceso es solo por una llamada telefónica, lo que está alejando a los más jóvenes, acostumbrados a usar smarthphone.

"Durante 2018 nos dimos cuenta, dada la falta de oferta en materia de programas de salud mental, que esto también era un espacio para población que no se identifica necesariamente con la comunidad LGBTI+ que lo está pasando bastante mal y que no tiene cobertura", dice Poblete.

Todo Mejora firmó un acuerdo con Google: cuando una persona en Chile busca métodos para suicidarse, siempre va a aparecer entre los primeros resultados el acceso directo a la aplicación.

Imagen-PROYECTO-TODO-MEJORA054.jpg

***

Una niña de 12 años escribe:

"No sé cómo salir del clóset, mis amigas usan el término "lesbiana" como un insulto (en broma), no son homofóbicas, al contrario, pero ellas han dicho que les da miedo que al tener una amiga lesbiana, esta se enamore de ellas, ya hay muchos amigos que saben sobre mi orientación sexual (soy pansexual), pero realmente me da miedo decirles a algunas amigas cercanas, me da miedo que se alejen, sé que no lo harán, pero aún así me asusta".

Aunque no existe mucha información oficial al respecto en Chile, la experiencia internacional indica que la comunidad LGBTI+ está más expuesta a sufrir trastornos como depresión o ansiedad y a presentar riesgo suicida.

Como funciona por internet, Hora Segura tiene una ventaja respecto de otros tratamientos en Chile: sus resultados se pueden cuantificar fácilmente y así se pueden caracterizar los problemas que sufren los adolescentes LGBTI+ en Chile.

"Estos mensajes dan cuenta de disparidad de salud mental que viven personas de la diversidad sexual y de género. Estas disparidades tienen que ver con resultados negativos cuando podrían ser prevenibles y, sin embargo, se siguen dando. Se explican por condiciones sociales, culturales o estructuras adversas y que dan cuenta de inequidad en las poblaciones cuando el acceso a la salud contiene barreras o no es igualitaria", cuenta Alemka Tomicic, codirectora del Centro de Estudios en Psicología Clínica y Psicoterapia (CEPPS) de la Universidad Diego Portales.

Los datos obtenidos a través de Hora Segura dan cuenta de los factores que afectan a los jóvenes según su orientación sexual e identidad de género. En sus mensajes revelan que han sufrido vulneraciones desde pequeños y que estas se van repitiendo en distintos niveles. Primero, dentro de su entorno familiar y, luego, con sus pares. La relación con los padres casi siempre es conflictiva y es la primera barrera para poder hablar de esos problemas.

La sensación de soledad, la falta de redes de apoyo y el desgaste producido por dinámicas violentas agudizan el comportamiento suicida.

Los testimonios también relatan que la identificación de la orientación sexual no es un problema en sí mismo. El problema es poder salir del clóset frente a conocidos.

***

Un joven de 18 años empezando su transición abrió la aplicación y se comunicó con un especialista de Todo Mejora. Esto fue lo que le dijo.

"Sentía odio por mí mismo, odiaba sentir que tenía tantas personalidades, que era falso, que actuaba con todo el mundo y de formas distintas, odiaba no poder tener la vida de mis personajes en role play, odiaba estar solo y nunca haber encontrado a ningún chico que me correspondiera de forma amorosa".

Para jóvenes trans, el acceso a salud mental es incluso más complicado. Recién en junio de este año, la Organización Mundial de la Salud dejó de considerar la transexualidad como un trastorno psicológico para definirla solo como un problema físico: que el cuerpo no coincide con la identidad de género de la persona. Por este cambio, la atención especializada debería estar centrada en apoyar a los jóvenes con trastornos mentales ocasionados por el entorno.

Sin embargo, según la experiencia que cuentan en Hora Segura, muchos adolescentes trans deben soportar que siquiatras y sicólogos sigan pensando que ser trans es el problema. Eso ha sido una complicación para iniciar tratamientos. La atención para jóvenes transgénero se termina transformando casi en una cuestión de suerte.

"Hay un chico que llega a través de la Hora Segura y que empieza a descubrir su necesidad de iniciar su transición de género, y todo el proceso de acompañar a la familia, porque al final es la familia completa la que transita, más que una persona sola. Todos esos son procesos que nosotros hemos podido acompañar", cuenta la jefa de Desarrollo de Contenidos, Rocío Faúndez.

Muchos de los jóvenes trans que envían mensajes en la Hora Segura cuentan que antes de llegar a ellos pasaron por varias experiencias fallidas con otros especialistas.

En mayo se registró el 22% de las atenciones de este año. Esta alza se debió al estreno en Netflix de la segunda temporada de la serie 13 Reason to Why, la que aborda el suicidio juvenil. Los productores de la serie realizaron una serie de videos donde los protagonistas invitaban a utilizar la plataforma de Todo Mejora en caso de necesitar ayuda.

A Hora Segura han llegado alertas de jóvenes que han confesado estar tomando pastillas para suicidarse o estar cerca de hacerlo. En esos casos excepcionales, los especialistas rastrean la dirección del usuario y envían a Carabineros para intentar evitar el suicidio.

***

Uno de los mensajes que más han marcado a los especialistas de la Hora Segura es el de un adulto heterosexual y cisgénero (que su identidad de género coincide con el sexo asignado al nacer). Aunque el perfil no corresponde a las personas con las que trabaja Hora Segura, ese testimonio es reflejo del tortuoso camino que debe pasar una persona sin acceso a ayuda especializada.

"Mi padre era albañil y mi madre trabajaba todo el día como nana en una casa. Lamentablemente, desde niño fui maltratado por mi padre, solo vi golpes como corrección cuando hacía algo malo; muchas veces mi mamá se interpuso para que no me pegara y los golpes los recibía ella (...); tengo muchos gestos, actitudes un tanto femeninas, es por esto que desde el quinto al octavo básico fui tratado como el hueco, el gay, el fleto del curso (...). Muchas veces me encerraba en los baños, me mojaban y me golpiaban (sic), por años me tragué todo esto, mi familia nunca se enteró, ya que no quería causarle una molestia a mi madre (...); en la enseñanza media esto se agudizo más, me siguieron tratando igual, lo peor vendría cuando mis propios compañeros abusaban de mí (...). Hoy soy un hombre, tengo 30 años, pero los recuerdos están en mi cabeza como si fueran ayer, soy un hombre totalmente miedoso en todo, no me he casado, porque tengo miedo a causarle daño a alguien, sinceramente ha sido un trauma todo esto, a mi haber llevo tres intentos de suicidio, pero siempre me pillan o me salvan, sinceramente ganas de vivir no tengo (...). La última vez que intenté matarme fue en marzo de este año y no dudo en volver a intentarlo, ya que así no puedo vivir, tengo tanto guardado en el alma y que nadie entiende. He sido rechazado siempre, quizás esta experiencia les sirva de algo a ustedes, si no les respondo es porque he dejado este mundo" .

Luego de ese primer contacto, la persona siguió comunicándose con un especialista por correo electrónico, recibiendo por primera vez ayuda para su depresión.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.