Revelan incómoda entrevista a Chino Ríos en Estados Unidos: “No me hagas preguntas así”

Hostiles y de muy pocas palabras. Así fueron las respuestas de Marcelo “Chino” Ríos en una entrevista que le hicieron a fines de los 90, después de su triunfo en el Grand Slam estadounidense. La prensa estaba ansiosa de conocer más sobre el chileno y su triunfal éxito en el tenis, sin embargo, fue difícil lograr que el tenista hablara.

Entre risas, Randy Walker, exjefe de prensa del US Open compartió la transcripción de ese incómodo momento en 1999, en su cuenta de Twitter, donde estableció -con ironía- que era “una de las mejores transcripciones de entrevistas posteriores al partido en la historia del US Open”.

Marcelo Ríos había logrado, con mucha dificultad, ganar contra Martin Damm, el tenista checo. Pero finalmente se llevó la victoria y, posteriormente, en la rueda de prensa, por alguna razón se mostró incómodo y no logró soltarse para responder las preguntas de los periodistas.

Después de contar un poco sobre los complicados partidos contra Damm, los periodistas siguieron entablando conversación y le preguntaron:

—¿Quiénes fueron los héroes de su infancia?

—¿Qué es eso?—, preguntó de vuelta Chino Ríos.

—Las personas que admirabas cuando eras pequeño—le explicaron.

Y, esperando alguna historia conmovedora, el tenista chileno se limitó a contestar una simple palabra.

—Nadie.

Ante la poca disposición, le preguntaron algo más fácil de responder.

—¿Cuáles son tus hobbies e intereses?

Aunque probablemente, como toda persona, tiene varios, Ríos no quiso compartirlos.

—Ninguno.

—¿Cuál es tu gran momento deportivo?—intentaron nuevamente preguntarle.

—No lo recuerdo, hombre—respondió el tenista con frialdad.

Ya cansados, los periodistas lo presionaron. Ríos, aún más molesto, replicó:

—¿Qué quieres que te responda?

—Solo responde las preguntas—le suplicaron.

—Entonces no me hagas preguntas así.

Lo último que se lee en el texto es que, en el último intento de lograr que se soltara, le preguntaron cuál era su película favorita. Marcelo Ríos simplemente no dijo nada y, probablemente, se retiró del lugar.