Aglomeraciones, aplausos a las 10, caravanas, lágrimas, colas de tres kilómetros, policías, corridas, balas de goma, gases lacrimógenos, piedrazos, heridos, caras de miedo, multitud... Las emociones y también el caos se mezclaron en el velatorio de Maradona y en el cortejo hasta el cementerio. Argentina le dijo adiós a su propio modo excesivo y desordenado.
Enrique Gastañaga, Buenos Aires
27 nov 2020 07:16 AM