Bitácora de contactos: La estrategia de Jacinda Arden para evitar la propagación del Covid-19 en Nueva Zelandia

Un rebrote del Covid-19 la semana pasada en Auckland volvió a encender rápidamente las alarmas del gobierno de Nueva Zelandia, luego de que el país pasara 102 días sin infecciones locales. Por eso, la primera ministra Jacinda Ardern anunció un plan de ataque para evitar que este rebrote signifique un descontrol de la pandemia en el archipiélago que sido elogiado por su respuesta ante la crisis sanitaria.

Ardern junto al director general de Salud, Ashley Bloomberg, anunciaron que Auckland pasó al nivel de alerta 3, hasta el 26 de agosto lo que significa que existe un mayor riesgo de que la enfermedad no esté contenida. Actualmente el país suma 1.643 casos de Covid-19 y 22 fallecidos.

Como la movilidad volvió a ser reducida en esta fase, con colegios y lugares públicos cerrados, reuniones masivas canceladas, etc.; también se redujo la cantidad de contactos que los 1,7 millones de habitantes de Auckland tiene. Esto facilita el trabajo a los rastreadores de contactos, ya que es posible que solo tengan que rastrear uno o dos contactos por persona en lugar de 10 o más.

Pero en ese punto también se le pide ayuda a los ciudadanos con la tarea de hacer una lista de dónde han estado y a quiénes han visto durante las últimas dos semanas. La idea es que todos lleven un diario o bitácora en el que registren constantemente sus actividades.

Esta tarea ya había sido pedida anteriormente por la primera ministra en abril, a todo el país. “Les pediría a los neozelandeses que piensen en hacer eso. Solo mantengan una nota rápida de dónde han estado y con quién han estado“, dijo Ardern al día siguiente de que el país relajara por primera vez sus medidas de restricción frente a la pandemia. “No solo los ayudará a ellos, también nos ayudará a nosotros”, agregó.

Así, esta vez los habitantes de Auckland deberán volver a cumplir con este cometido, lo que también se vincula con un llamado a usar la aplicación NZ COVID Tracer para llevar un registro. Esta app tiene la ventaja de que el Ministerio de Salud puede notificar automáticamente a cualquier persona que haya visitado el mismo lugar que un caso confirmado o potencial.

“Alentamos a los habitantes de Auckland en particular a que revisen sus aplicaciones, diarios y cuentas bancarias para recopilar tantos detalles como sea posible de los lugares que han visitado o las personas que han conocido durante los últimos 14 días”, escribieron tres expertos neozelandeses la semana pasada en una columna en The Conversation.

La importancia del rastreo de contactos a la hora de combatir la propagación del virus ha sido confirmada por diversos informes. Un estudio publicado a mediados de junio en The Lancet confirmó que el seguimiento o rastreo de los positivos de Covid-19 y de sus contactos es fundamental para controlar la pandemia. Los autores del estudio, basado en Reino Unido, descubrieron que incluso si las personas se distanciaban socialmente a un grado moderado, un importante esfuerzo en la trazabilidad de contactos podría reducir la propagación viral en un 66% y, finalmente, eliminar la transmisión.

Ante los nuevos casos surgidos en el país, la primera ministra anunció el domingo la postergación de las elecciones legislativas que tendrían lugar el 19 de septiembre, sin embargo, la cita electoral se aplazó hasta el 17 de octubre. Según Ardern, esto permitirá a la comisión electoral habilitar centros de votación anticipada y darle la oportunidad a los partidos de realizar sus campañas.

Los rebrotes en Nueva Zelandia también generaron que el Presidente Donald Trump criticara la estrategia del país frente al Covid-19. En un mitin electoral en Minnesota ayer, Trump aprovechó de apuntar a sus críticos, quienes pusieron a Nueva Zelanda como ejemplo.

“Ven lo que está pasando en Nueva Zelandia”, dijo Trump a sus partidarios. “Lo ganaron, lo golpearon. Era como la noticia, lo golpearon porque querían mostrarme algo”, y habló de un “gran aumento en Nueva Zelandia”. Trump agregó: “Es terrible. No queremos eso”.

La premier neozelandesa respondió hoy al mandatario de Estados Unidos y señaló que el comentario de Trump “obviamente, es evidentemente incorrecto”. “Cualquiera que esté siguiendo, verá con bastante facilidad que los nueve casos de Nueva Zelanda en un día no se comparan con las decenas de miles de Estados Unidos”, agregó la premier.