Cristóbal Lira, a dos meses de asumir en Lo Barnechea: Renunció a directorios y es el único alcalde con fideicomiso ciego

Se le suele ver llegar caminando al municipio diariamente y, por lo general, termina su jornada laboral muy tarde.

Juan Cristóbal Lira Ibáñez (62), ex Subsecretario de Prevención del Delito durante el primer gobierno de Sebastián Piñera, asumió el 6 de noviembre como alcalde de la comuna de Lo Barnechea, cuando Felipe Guevara tomó el cargo de intendente de la Región Metropolitana tras la llegada de Karla Rubilar a la vocería de Gobierno.

Llevaba ya dos años como concejal independiente-UDI en la comuna y, pocos días antes ser escogido como nuevo alcalde por el consejo, el también empresario -que fue gerente general de D&S en sus inicios- renunció a una serie de directorios y mandató un fideicomiso ciego para sus inversiones. La ley 20.880 sobre Probidad en la Función Pública y Prevención de los Conflictos de Intereses, establece que las personas que poseen más de 25.000 UF en su patrimonio deben hacer un mandato de administración de valores.

Es, así, el único alcalde en acogerse a esta figura, que en el Ejecutivo actualmente mantienen el Presidente Sebastián Piñera y el ministro Alfredo Moreno. También lo tuvieron los exministros José Ramón Valente, Felipe Larraín y Juan Andrés Fontaine.

Su primera renuncia la comunicó al directorio de Ditec, importadora de vehículos de lujo que en Chile comercializa automóviles de las marcas Porsche, Land Rover, Jaguar y Volvo, en la cual es socio con Juan Sebastián De Carcer. Aquí, Lira congeló su participación accionaria, mientras ejerza su cargo como jefe comunal. Ello en medio de una profunda reestructuración de la compañía que conllevó a la salida de una serie de ejecutivos, entre ellos la partida del gerente general de Prosche Chile, Alfredo Gantz.

Lira también renunció al directorio de Lounge S.A. Se trata de un emprendimiento familiar que se dedica a la venta de accesorios y prendas de vestir femeninas. La firma se mueve en el retail, uno de los mercados que bien conoce, pues durante años se desempeñó como gerente general de D&S, compañía vinculada a sus primos Nicolás y Felipe Ibáñez Scott que fundó la cadena de supermercados Lider.

El empresario también dejó su cargo como director en la Fundación Adolfo Ibáñez, entidad detrás de la casa de estudios que fundó su abuelo su abuelo Adolfo Ibáñez Boggiano en 1953. Aquí, Lira cursó estudios superiores y se tituló como ingeniero comercial.

En línea con lo dispuesto por la Ley 20.880 sobre Probidad en la Función Pública y Prevención de los Conflictos de Intereses, el alcalde entregó un mandato a Picton Advisors y en particular al ingeniero comercial Sebastián Arancibia, Gerente de Multi Family Office Chile. Mediante este procedimiento legal, delegó responsabilidades y funciones sobre su fortuna, a la cual no podrá acceder ni conocer sus movimientos mientras se desempeñe como alcalde.

¿Pero de qué cifras estamos hablando? Según los plazos legales, Lira debería haber presentado su declaración de Patrimonio e Intereses (DPI) hace un mes, trámite que aún no realiza.

Según su última DPI, que data del 26 de marzo de 2019, Lira mantiene un 25% de las acciones en Asesorías e Inversiones Ramle Limitada, cuyo valor libro asciende a $330.000.000. Además posee el 99% de los títulos de Servicios e Inversiones CLI S.A. con un valor corriente de $357.565.841.

Sin embargo, su mayor patrimonio se concentra en otras sociedades. Aquí destaca la sociedad Inversiones Zapallar Limitada con un 25% de los derechos y con un valor corriente plaza de $ 1.730.150.321. A ella se suma también su participación en Inversiones Civiles El Roquería Limitada con un valor libro de $3.052.055.328.

Lo expuesto en su DPI no detalla la totalidad de su fortuna. Esto básicamente por dos motivos. Primero, al haber efectuado su presentación bajo el cargo de concejal no está sujeta a la obligatoriedad de detallar el mandato entregado sobre su fortuna. Mientras, por otra parte, en el escrito tampoco se aclara cuál es su participación en Ditec.

Desde el municipio se afirma que, al asumir a pocos días del estallido social del 18 de octubre, Lira intentó reajustar la gestión. Bajo ese contexto el jefe invitó a dirigentes sociales de la comuna a una serie de conversatorios que instauró los días miércoles en el Centro de Las Tradiciones. Luego hizo lo mismo con funcionarios del municipio y se propuso dedicar al menos dos horas diarias para recorrer caminando distintos barrios de la comuna de los sectores más vulnerables, como Cerro 18 y Lo Ermita.

La agenda social también involucró el área de salud, donde estableció convenios con clínicas privadas para efectuar durante los meses de enero y febrero operaciones en beneficio de mil personas. El presupuesto total del municipio asciende a $130 mil millones y a fin de financiar los procedimientos médicos, la municipalidad postergó proyectos de inversión. Ejemplo de ello es el Parque del Cerro del Medio, iniciativa que requería una cantidad de recursos importantes y diseñado por el arquitecto Juan Grimm. Dichos recursos fueron redestinados a obras sociales del municipio.

El municipio también determinó elevar la pensión de quienes reciben entre $90 mil y $110 mil, a fin de que no obtengan menos de $165 mil. Y resolvió también devolver el pago de contribuciones durante los meses de septiembre y noviembre del año pasado a quienes forman parte de los quintiles más bajos a fin de que éstas tengan una holgura durante Navidad.