Jorge Pizarro (DC) y debate por límite a la reelección: “Es muy parecido a cuando nos chantajearon para eliminar el voto obligatorio”
El legislador defiende su rechazo al polémico proyecto. Asegura que nadie se hizo cargo del costo que significó para la democracia establecer el voto voluntario y advierte que hoy puede pasar lo mismo con esta iniciativa.
Terminando sus 14 días de cuarentena tras haber sido detectado con Covid-19, el senador Jorge Pizarro (DC) en esta entrevista se hace cargo de su votación de rechazo al proyecto que pone límite a la reelección de autoridades y su retroactividad. También dice ver un cambio de actitud del Presidente Sebastián Piñera para enfrentar la pandemia.
¿Por qué votó en contra del límite a la reelección?
No es que haya votado en contra de nada, yo siempre he estado a favor de que en una democracia sean los ciudadanos los que definan quiénes son sus representantes. Hoy día casi no queda ningún sistema en el mundo donde se establezca una limitación de este tipo. En Chile este tema se viene tratando hace tiempo, y en el caso mío, el año 2013 dije públicamente que era la última vez que postulaba. La renovación de liderazgos no se produce por el hecho de eliminar a algunos de los que están.
¿Entonces no cree que su votación fue darle la espalda a lo que pide la ciudadanía?
No creo que sea darle la espalda o darle el favor, creo que el debate no es ese. Vuelvo a insistir en que son los ciudadanos los que eligen y votan de manera libre, secreta e informada. Si alguien lo está haciendo bien lo van a reelegir, si alguien lo está haciendo mal no van a votar más por él. De hecho, en nuestro Congreso hay una renovación muy importante en cada elección. Entiendo que el punto tenía más asidero cuando teníamos sistema binominal porque la oferta de candidatos era más reducida.
Algunos diputados y los senadores Francisco Huenchumilla (DC) y Felipe Harboe (PPD) interpretan que la reforma constitucional, al ser una “norma de derecho público”, regiría en el acto para parlamentarios en ejercicio.
Lo que me llama la atención si es así es por qué plantearon la indicación de la retroactividad, eso es lo que no logro entender.
¿Usted cree que la retroactividad se está utilizando para sacar ventajas personales? Algunos plantearon conceptos como vendettas durante el debate en el Senado.
Algo de eso hubo en el debate, sin duda, por la intervención de algunos colegas, y si es así es muy triste y muy lamentable.
Pero, ¿usted comparte eso de que hay temas personales?
Vuelvo a decir, si hay algo así lo encontraría muy penoso y lamentable.
¿Qué le parecen los cuestionamientos desde la Cámara de Diputados, donde la mayoría quiere la retroactividad?
Me llama la atención, porque el texto de la Cámara, tal como lo aprobaron los diputados, permite que aquellos que hemos cumplido los tiempos que se establecen en el proyecto pudiéramos repostular. Entonces, no entiendo esas críticas. Más bien debería haber una autocrítica de ellos.
Si usted no va a repostular, ¿por qué ganarse un dolor de cabeza rechazando un proyecto así?
Voté porque estoy convencido de que son los ciudadanos los que deciden, no una norma. Este debate es muy parecido a cuando nos obligaron y nos chantajearon para eliminar el voto obligatorio por el voto voluntario. Hoy día nadie responde por el costo que ha significado para la democracia eso.
Positivo de Covid-19 y manejo del gobierno
Llevándolo a otro tema, ¿cómo enfrentó su examen positivo para Covid-19?
Sin duda es muy duro. He hecho el aislamiento que se me ha indicado por los médicos, he tenido la gracia de Dios, de realmente pasarla sin síntomas complejos. Pero sé que hay miles de compatriotas que lo están pasando muy mal. El aislamiento no es sencillo de cumplir, yo he tenido todas las facilidades, pero me doy cuenta de que el mayor problema que tenemos es que la mayoría de los chilenos no puede cumplir la cuarentena cuando no se tiene las condiciones mínimas para subsistir, cuando no se tienen espacios para llevarla adelante y no se tienen los ingresos para la alimentación elemental.
¿Tuvo miedo de que la enfermedad fuera más agresiva?
Todos tenemos un temor natural, pero debo confesar que me sorprendí de salir positivo porque hasta el momento de hacerme el examen, producto de lo ocurrido con el senador Rabindranath Quinteros, no tenía síntomas de ningún tipo. A uno se le produce temor por uno mismo, por los cercanos, por quien vive con uno, por la familia, por la comunidad en la que está y por lo que implica esta enfermedad. Con el paso de los días uno se va tranquilizando, pero decir que uno no siente temor, no sería sincero con uno mismo.
¿De las altas cifras de muertes y contagios que estamos conociendo a quién responsabiliza?
La apuesta que hizo el gobierno de hacer estas cuarentenas por sectores y simultáneamente mantener una cierta actividad social y económica resultó un fracaso rotundo, lamentablemente. Uno no saca nada con llorar sobre la leche derramada, lo que importa ahora es ser capaces de encarar esta etapa más dura con una estrategia adecuada y eso pasa por un cambio completo. No solo decretar cuarentenas generales, sino que garantizarle a la población de los sectores medios y más vulnerables que esas cuarentenas se puedan cumplir en las casas. Si eso no sucede vamos a tener más muertes y más costo social y económico.
¿Usted comparte las opiniones que piden la salida de Mañalich?
Desde que se inició esta emergencia he dicho que nuestro rol desde la oposición, primero es tratar de colaborar y plantear propuestas. Uno puede criticar, sugerir, opinar, proponer, pero son las autoridades las que toman las decisiones y asumen la responsabilidad. Es el Presidente quien nombra a sus ministros. Lo que más me importa es que pareciera, y espero que sea así, que hay un cambio de actitud importante desde el Presidente y todo su equipo.
¿Hacia dónde hay que apuntar para enfrentar la crisis social y sanitaria?
Lo primero es un cambio de actitud del gobierno y eso implica reconocer con humildad los errores que se han cometido. Es fundamental que se puedan recuperar confianzas, que el gobierno no tiene, y hay que reconocer que tampoco la generamos nosotros desde la oposición. Segunda condición, es que el gobierno debe estar dispuesto a escuchar y analizar las propuestas que le hagan actores distintos... Debemos elaborar propuestas que busquen proteger a las familias más pobres y de clase media, a las pymes y a las empresas estrategias del país.
¿Por donde pasan algunas de las soluciones?
El Estado debe gastar más en los próximos 18 meses y para eso hay que endeudarse y será del orden del 5% del Producto Interno Bruto. Hay que colocar más recursos encima de la mesa y eso traducirlo en inversión pública en fomento productivo, para eso se requiere hacer uso del FEES y adquirir una mayor deuda y esto debe ir aparejado con el compromiso de volver a una responsabilidad fiscal, para el año 2023.
Comenta
Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.