Museo Violeta Parra y Cine Arte Alameda planean traslado al Centro de Extensión del Instituto Nacional

Tres incendios sufrió el Museo Violeta Parra en febrero de este año en medio de las manifestaciones sociales. Los siniestros consumieron el primer piso del edificio incluyendo el sector del auditorio Antar, sin embargo las obras de la artista habían sido retiradas y resguardadas previamente. Actualmente la investigación para conocer el origen de los incendios sigue en curso y el museo espera su traslado temporal.

Por estos días la opción que se visualiza para el funcionamiento temporal del Museo Violeta Parra son las dependencias del Centro de Extensión del Instituto Nacional. “Esta opción me parece fantástica. Aún no hay fecha, pero estamos todos de acuerdo, incluyendo el alcalde, entonces yo espero que lleguemos a buen puerto”, dice la presidenta del directorio del museo, Carmen Luisa Letelier. “Es un lugar emblemático, está en el centro y cerca de los jóvenes”, añade.

Se espera que el Museo Violeta Parra pueda funcionar allí durante el tiempo que demore la reconstrucción una vez que termine la investigación. " Son unos dos años para todo el proceso de los seguros y arquitectura. Va a ser un proceso largo y el museo no puede detenerse", comenta el musicólogo Juan Pablo González, también miembro del directorio.

Inaugurado en 2018 y ubicado en Arturo Pratt 33, el Centro de Extensión del Instituto Nacional es un espacio de 5.800 m2 distribuidos en cinco niveles. Incluye el Aula Magna con capacidad de 800 butacas, una sala de cámara para 200 personas, dos salas de exposiciones, dos multimedia y otras dos de ensayo.

“Es un buen lugar donde por un lado podemos tener las oficinas para que trabaje nuestro personal, tiene un espacio de exhibición donde podríamos poner las arpilleras y óleos y además hay un espléndido teatro”, dice Juan Pablo González.

Tras el estallido social del 18 de octubre de 2019 y las posteriores manifestaciones, la administración del Museo Violeta Parra fue criticada por el rol social que tomó. “Hay una directora (Cecilia García Huidobro) con la que no coincidimos en la forma en que había que poner a Violeta Parra dentro de esta crisis”, dijo Isabel Parra a La Tercera en febrero de este año.

Sobre el rol del museo y la figura de Violeta Parra en medio de la crisis social, Carmen Luisa Letelier señala: “El museo tiene una finalidad que es resguardar la obra y memoria de la artista. Acá no importó que fuera el museo de Violeta Parra y fue quemado tres veces, nosotros pensamos que por ser la imagen de la Violeta se iba a respetar”.

Juan Pablo González, añade: “Con todo lo que dijo Violeta Parra sobre este país, que es tan válido, ella lo hace desde su perspectiva de artista. El grito de Violeta es un grito de artista, de producción simbólica y trasciende la contingencia”.

El Centro Arte Alameda, por otro lado, tiene una relación más antigua con el Centro de Extensión del Instituto Nacional (Ceina). A inicios de año, dos meses después del siniestro que afectó el recinto de Plaza Italia, el espacio cultural dirigido por Roser Fort concretó una alianza con el organismo de Arturo Prat 33 y ya el 27 de febrero realizaron una avant premiere de la película colombiana Monos de Alejandro Landres.

“Fueron más de 600 personas, con el respectivo cóctel de ese tipo de eventos”, comenta Roser Fort. “Por supuesto que ese tipo de presentaciones ya no se pueden hacer en tiempos de emergencia sanitaria” agrega la directora del Centro Arte Alameda, que espera reanudar las actividades presenciales en el Ceina en noviembre.

“El plan es comenzar en alguna fecha de ese mes, en la medida que el proceso de desconfinamiento avance. El Centro Arte Alameda utilizará la llamada Sala de Cámara, que tiene capacidad para 200 personas”, dice Fort.

¿En qué fase actual se encuentran?

Estamos bastante avanzados y ahora nos encontramos en la fase de sanitización, con todos los protocolos que hay que cumplir en el caso. Todo debe ser progresivamente, sin apurarse.

¿Cómo sería la programación?

Me parece que hay que ser realistas y ser claros en el sentido de que ya nadie puede pensar en programación de lunes a domingo, con cuatro funciones diarias. Robando una frase que escuché en un seminario, diría que ahora los espectáculos presenciales son un lujo y las obras online son la normalidad. Y no hay audiencias, sino que personas. Son menos.

¿Cuántas funciones harían?

Serán alrededor de cuatro a la semana y la idea es partir, por supuesto, con una programación que sea llamativa, fuerte. Todos los equipos que estamos utilizando y, en general, los medios que tenemos para las películas presenciales son gracias al apoyo económico del Ministerio de las Culturas. Nuestro proyecto también implica hacer algunas funciones en la azotea del Instituto Nacional, siguiendo un poco el modelo que se ha utilizado al aire libre en España e Italia.

¿Cómo va el plan de reconstrucción del nuevo Centro Arte Alameda?

Acabamos de retomar las conversaciones con el jefe de gabinete del nuevo ministro del Interior. Después de eso vendrá una nueva reunión entre Interior y el Ministerio de Bienes Nacionales para determinar definitivamente cómo se puede articular la posibilidad de reconstruir el Centro Arte Alameda.

¿La idea es seguir en el mismo lugar, a una cuadra de Plaza Italia?

Por supuesto, es un lugar emblemático. El Centro debe seguir en una zona que debe renacer y tener una vida después de todas las demandas de la ciudadanía. Nuestra misión es hacerlo con calma y en la misma zona.