El miércoles 17 de febrero, a eso de las 14 horas, se reunió el Comité de Urbanismo de la Municipalidad de Vitacura para analizar uno de los proyectos más ambiciosos de Cencosud en la comuna. Se trata de Alto Las Condes 2, ubicado en un terreno al otro lado de Av. Kennedy, justo frente al mall homónimo, también propiedad del holding liderado por Horst Paulmann.

En el año 2010, el conglomerado compró el terreno de 25.000 m2 al empresario Carlos Celle Cafferata. El paño es de alto interés para Cencosud, en particular porque se verá beneficiado con la futura construcción de una de las estaciones del Metro de la Línea 7. De hecho, según algunas publicaciones de la época, el holding habría planeado invertir más de US$ 300 millones en las obras.

Pero el origen de la discrepancia se remonta a 2015, cuando la administración del municipio, encabezado por el alcalde Raúl Torrealba, caducó el permiso de edificación del proyecto otorgado por la Dirección de Obras en el año 2000. Frente a la arremetida de la corporación, Cencosud acudió a la justicia para salvar la tramitación que autorizaba al holding a construir una torre de 55 pisos, varios edificios y un centro comercial.

Sin embargo, a raíz de una modificación en la norma de edificación, el municipio de Vitacura ahora sólo permite obras de hasta siete pisos.

El caso pasó a manos de la Corte Suprema, que determinó que la autorización está vigente y, a partir del fallo, la Contraloría General de la República ordenó al municipio revaluar el reclamo de Cencosud. Acto seguido: Cencosud solicitó a la DOM revaluar los antecedentes, a fin de dar viabilidad al proyecto.

Ahora, este análisis entró en la recta final.

A la reunión del Comité de Urbanismo asistió la directora de Obras, Pamela Ortiz, quien -a fin de dar mayor legitimidad al proceso- explicó que se inhabilitó debido a que anteriormente, en tribunales, había manifestado su posición de caducar el permiso. Lo mismo hizo la subdirectora de la DOM, Macarena Camposano, también partidaria de rechazar la petición del holding.

Frente al escenario, el alcalde Torrealba nombró a la arquitecta Carolina Zúñiga, quien asumirá el rol de directora de Obras titular para evaluar la discrepancia con Cencosud.

“Por ser una persona ajena al tema, tuve que empezar a analizarlo desde cero. Hice todo un análisis del proceso, tanto del permiso como de las actuaciones administrativas asociadas al mismo documento. Eso lo hemos estado revisando con la división jurídica y el titular del proyecto. En este minuto el análisis está casi 100% listo y estamos en el proceso de revisión de la resolución”, explicó en la reunión.

Si bien la autoridad declinó efectuar comentarios sobre el resultado de la resolución, la cual espera que se pueda oficializar dentro de las próximas semanas, anticipó que dentro de los “miles de antecedentes” que estudian figuran certificados de obras que ha presentado Cencosud. El análisis que realiza la municipalidad está basado en los lineamientos que entregaron la Contraloría y la Seremi de Vivienda y Urbanismo.

“Ellos dicen que hay ciertos documentos que se deben analizar y no solo los certificados de obras. Son miles de documentos y al menos unas cuatro cajas. Todos estos documentos están analizados en una línea de tiempo que va y viene. No es un tema fácil de comentar y es un análisis súper riguroso”, explicó Zúñiga al comité interno. De igual manera, aclaró que la resolución final que se encuentra en revisión con el área jurídica luego será evaluada con Cencosud y, finalmente, con el alcalde.

Consultada sobre si el conglomerado mantiene aún interés en desarrollar un nuevo centro comercial en el terreno de Vitacura, María Soledad Fernández, gerenta de Relación con Inversionistas y Sostenibilidad de Cencosud, contestó: “Tenemos una cantidad importante de ampliaciones y remodelaciones en el caso de Chile. Además, tenemos dos nuevos centros comerciales, uno en Perú y otro en Colombia. Por el momento, esos son los centros comerciales en los que estamos trabajando”.

Al mismo tiempo, la directora de la DOM, Carolina Zúñiga, explicó que en los próximos días espera reunirse con representantes de Cencosud en una cita que catalogó como “la última” antes de oficializar su resolución.

En la reunión, la concejala Francisca Cruzat consultó si Cencosud podría acudir a tribunales a raíz de la resolución. Sobre eso, la directora respondió: “Supongo que no, porque esto ya pasó por tribunales. La instrucción es que la Dirección de Obras debe analizar nuevamente todo este proceso bajo los nuevos criterios que establecen los tribunales, la Contraloría y la Seremi”. Y agregó: “No debería (haber apelación), porque este es el proceso final en que se va a resolver el tema”.

También, la concejala Luz Pacheco consultó si Cencosud ha insistido en que sea validado el permiso de edificación con las mismas características de constructibilidad. Al respecto, Zúñiga sostuvo que “los permisos de edificación siempre pueden modificarse, hay una fórmula que permite la ordenanza. Entonces, siempre pueden ir modificándose los proyectos aprobados”.

La directora también fue requerida por el concejal Max del Real sobre si el proceso podría terminar en un avenimiento o punto medio entre lo que propone Cencosud y el municipio. La directora lo descartó de plano: “Esto no es un acuerdo, ni una transacción, ni nada de eso. Esto es un análisis que dirá sí o no, de acuerdo a los documentos que hay, nada más. No hay propuesta que se genere entremedio del análisis ni nada”.

“El objetivo siempre ha sido analizar los documentos y los hechos que han ocurrido en el tiempo”, remató Zúñiga.