Ya no se hablan: La historia del quiebre entre José Antonio Kast y Jaime Bellolio

Sorpresivamente, en mayo de 2016, José Antonio Kast anunció su renuncia de la UDI. Pocos sabían, algunos sospechaban y varios terminaron lamentándose. Los más afectados fueron sus "ahijados" de la UDI, los que había guiado en sus primeros periodos como diputados gremialistas. En esa lista se encontraba el actual candidato a presidir la UDI, Javier Macaya, la diputada María José Hoffmann y el ex diputado Arturo Squella. Y también estaba Jaime Bellolio quien durante esa época ya era diputado del distrito que había heredado del propio Kast. "Para mí es doloroso, porque yo entré a la UDI y a la política por él", dijo Bellolio cuando se hizo pública la noticia.

Hoy, dos años después de ese episodio, esa relación está más que rota.

No se hablan desde hace un año y en los últimos meses se han criticado públicamente profundizando un quiebre que comenzó con diferencias políticas y que ahora permeó al ámbito personal. Incluso, las esposas de ambos también eran cercanas y tampoco ya no intercambian palabras.

Cercanos a Kast y Bellolio cuentan que la relación se comenzó a fracturar apenas el ex candidato presidencial dejó la UDI. Bellolio fue de los que instó a Kast para que no fuera directo a primera vuelta presidencial, sino que compitiera en las primarias de Chile Vamos. Finalmente, él ignoró esas sugerencias y llegó hasta la primera vuelta donde logró casi el 8% de las preferencias.

Desde ahí, agregan, las diferencias políticas se acrecentaron. Bellolio siempre ha pertenecido al ala "liberal" de la UDI y el ex diputado apenas dejó el partido comenzó a endurecer su discurso político. "Nos hemos distanciado harto. No solo porque él ya no está en el Congreso y no nos vemos, sino porque él ha seguido una línea política que no comparto. Él me ha criticado públicamente de manera bien fuerte y yo no voy a caer en eso, le sigo teniendo estima", dijo Bellolio en el programa "Stock Disponible" de Via X.

Desde el entorno de Kast dicen que Bellolio "ha cambiado" que "ya no es el mismo" y que incluso se ha izquierdizado. "Está peleando con todos (…) Yo peleo para la izquierda, él está peleando con los propios", opinó Kast en el programa Cadena Nacional.

Los desacuerdos políticos y los problemas personales se hicieron evidentes en la discusión por la ley de identidad de género. En su intervención al momento de votar, el diputado Bellolio hizo público que sus datos personales se habrían filtrado y si bien en ese momento no sindicó como responsable a los cercanos a Kast sí lo hizo después. Bellolio comentó en el mismo programa de Via X que sus datos se habrían dado a conocer en un grupo de Whatsapp de Acción Republicana –el movimiento de Kast- y que el ex candidato presidencial estaba en ese grupo y no hizo nada por detener la filtración y los cerca de 20 insultos que recibió a través de esa aplicación.

"Sin embargo, creo que él podría haber hecho más para evitar que grupos de sus seguidores me amenazaran a mí, empezaran a mentir en grupos de Whatsapp, inventando cosas que involucran a mi familia, a mi señora, entonces ese tipo de cosas hay que tener cuidado, uno tiene que hacerse cargo de la consecuencia que genera", agregó Bellolio.

Al día siguiente de esas declaraciones, Kast dijo en el mismo canal que José Carlos Meza –jefe territorial de su movimiento- se había comunicado con Bellolio para que le entregara los datos de las personas del movimiento que lo habían amenazado e insultado para así desvincularlos de Acción Republicana. Sin embargo, desde el entorno de Bellolio dicen que nunca nadie se comunicó con ellos y que Kast mintió.

Desde el círculo del diputado dicen que él está "dolido". Que Kast era un amigo y que el ex candidato presidencial ha criticado a Bellolio más que a cualquier otro dirigente político de Chile Vamos. "Se equivoca el diputado Bellolio al caer en el juego de la izquierda ideológica. La Corte Suprema aplicó la ley como corresponde que lo haga", tuiteó Kast en agosto a raíz de las declaraciones de Bellolio diciendo que no se justificaba la libertad para algunos presos de Punta Peuco. Tras eso, y en medio de la discusión por la ley de identidad de género, volvió a arrobar a Bellolio en Twitter algo que no cayó bien en el círculo del diputado. En ambos tuits, las respuestas son, en su mayoría, insultos contra el diputado.

El último episodio se dio el 11 de septiembre de este año. Bellolio estaba haciendo uso de la palabra en la Sala de la Cámara cuando los diputados del Frente Amplio se pararon a la misma hora de los bombardeos de 1973 en La Moneda para hacer un homenaje. Bellolio paró de hablar y le pidió a Jaime Mulet, que oficiaba como presidente de la mesa, que se hiciera el homenaje pero que después de éste se le respetara el tiempo para intervenir. Los chats de Acción Republicana ardieron. Le dijeron de todo al diputado, algo que generó aún más enojo en él y su entorno.

El quiebre entre quienes fueran maestro y discípulo es irreconciliable, según cuentan quienes siguen siendo cercanos a ellos. "Cuando es un amigo, duele distinto a si fuera de un adversario", dijo Bellolio esta semana.