El paso al frente de Boric

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AGENCIAUNO.

Esta semana el Presidente se involucró personalmente en generar un clima de colaboración con el mundo empresarial para lograr un nuevo pacto fiscal. Al mismo tiempo, dejó atrás su tono prescindente en el tema constitucional y estuvo encima de la crisis de salud y la contención del sexto retiro.


Varias conversaciones ha sostenido esta semana el Presidente Gabriel Boric, con un objetivo claro que se trazó como prioritario y en lo que ha asumido un rol protagónico: lograr un acuerdo amplio y transversal que haga viable un nuevo pacto fiscal. Esto, luego de que anunciara en su última cuenta pública que insistirá en el Senado con el proyecto de reforma tributaria, el que ya fue rechazado por la Cámara deDiputados en su idea de legislar y para el que requerirá de un quórum de 2/3

Algo de eso habría abordado con el expresidente Ricardo Lagos, con quien sostuvo un diálogo la tarde del martes. Horas antes, el Jefe de Estado había recibido en su oficina al presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), Ricardo Mewes, con quien, más que abordar elementos específicos del proyecto, coincidió en la necesidad de tejer las confianzas necesarias para arribar a un pacto tributario que sea sostenible en el tiempo y cuyo contenido sea parte de un consenso de todos los actores de la sociedad.

Esa noche, además, hizo un gesto similar al participar en el encuentro de conmemoración de los 20 años del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Chile y Estados Unidos, organizado por la Cámara Chilena Norteamericana de Comercio (Amcham). El jueves, en tanto, recibió a la nueva presidenta de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa), Rosario Navarro.

Las señales que ha dado el Mandatario al involucrarse personalmente en las conversaciones para viabilizar la reforma a la que condicionó parte importante de sus compromisos de su última cuenta pública no son casuales.

En Palacio afirman que el Presidente hará todo lo que esté en sus manos para generar un clima que permita llegar a acuerdos con el mundo empresarial. “Ha decidido asumir un rol de estadista en esa conversación”, dicen en La Moneda, donde recalcan que el Mandatario dejará el detalle de las negociaciones a sus ministros Mario Marcel (Hacienda) y Álvaro Elizalde (Segpres).

Por lo mismo, sostienen las mismas fuentes, Boric ha estado muy preocupado de que sus acciones generen condiciones óptimas para un acuerdo, cuidando el fondo y también las formas. Muestra de ello, recalcan en el gobierno, fue el gesto que le hizo en la cena de Amcham al presidente del Senado, Juan Antonio Coloma (UDI). El Mandatario ya estaba por salir del recinto cuando se enteró de que el senador intervendría y finalmente optó por devolverse para escucharlo.

La reforma tributaria, de todas formas, no es el único asunto en que Boric ha dado un paso al frente, lo que -en los hechos- implica un giro respecto de la estrategia más cuidada y contenida que había asumido en la previa de la cuenta pública.

Durante varios días de abril y mayo, el Jefe de Estado tuvo apariciones más controladas y no se involucró en debates complejos, como la crisis migratoria, dejando a sus ministros hacer las vocerías. Por ejemplo, solo entre el 13 de abril y el 2 de mayo, hubo 19 días en que Boric no respondió preguntas a la prensa.

También había guardado silencio respecto del proceso constituyente y su destino luego de la derrota que sufrió su sector el pasado 7 de mayo.

Pero esta semana no dejó espacio para interpretaciones y bajó varias líneas en la instalación del nuevo Consejo Constitucional. Su presencia no estaba contemplada originalmente en la ceremonia del día miércoles por los organizadores, y fue él quien activamente pidió estar presente y, además, tener un espacio para intervenir.

En un discurso de cerca de siete minutos, el Presidente llamó al nuevo órgano constituyente a poner el diálogo y el bien común por sobre todo y a generar un texto que dé certezas y estabilidad a Chile. El domingo, el Mandatario ya había quebrado su tono prescindente al señalar que valoraba el texto emanado de la Comisión Experta y que, si tuviera que votar ahora, lo aprobaría. Además, entregó otra definición al señalar que, al menos durante su mandato, esta era la última oportunidad para llegar a una nueva Constitución.

El Jefe de Estado también ha estado pendiente de las discusiones que se están dando en el Congreso. De hecho, estuvo atento a las complicaciones que enfrentaron sus ministros para contener el sexto retiro, el que -de todas formas- se terminó rechazando. Quienes han conversado con el Jefe de Estado en los últimos días aseguran que estaba muy pendiente de los oficialistas que no se cuadraron con La Moneda en esta pasada.

Por otro lado, se dio el tiempo de mandarle su apoyo al ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, tras los cuestionamientos que sufrió a propósito de su orientación sexual en los últimos días.

Al mismo tiempo, Boric lideró ayer el consejo de gabinete y llamó directamente a todos sus ministros a colaborar con la ministra de Salud, Ximena Aguilera, para enfrentar la crisis por falta de camas críticas y el aumento de circulación de virus respiratorios, la que calificó como de máxima prioridad. Durante la jornada, además, conversó con la titular del Minsal directamente las medidas que se están tomando para contener la situación. b

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